Leer a bebés y bebés es uno de los ejercicios de desarrollo más importantes que los padres pueden hacer. Además, puede ser muy divertido para usted y para su hijo, y servir como una maravillosa experiencia de unión. Sin embargo, hay algunas cosas que puede hacer para aprovechar al máximo la lectura de su hijo. Al poner algo de preparación en la lectura y tomar medidas para hacerlo más atractivo, tendrá más éxito leyendo a su hijo.

Método uno de dos:
Hacer la lectura interactiva

  1. 1 Lea a un ritmo lento. Mientras lees, asegúrate de ir despacio. Además, enunciar palabras con cuidado y correctamente. De esta forma, su hijo, dependiendo de la edad, puede seguirlo mejor. Además, leer lentamente hará que su tiempo juntos sea más relajado y agradable para los dos. En última instancia, si se apura en el libro, la experiencia puede parecer estresante para usted y su hijo.[1]
  2. 2 No te concentres en leer las palabras exactas. Mientras lees, no te preocupes por leer el libro palabra por palabra. Es más importante que transmita ideas importantes e involucre a su hijo en el libro. En definitiva, concentrarse en leer el libro palabra por palabra no solo lo distraerá de este objetivo, sino que también hará que la experiencia de lectura sea menos atractiva para su hijo.[2]
    • Parafrasear, si quieres
    • Reformule o ponga frases o conceptos difíciles en sus propias palabras.
    • Exprese conceptos familiares en una perspectiva lingüística o cultural que sea exclusiva de su familia.
  3. 3 Usa tu voz y tus manos. Ya sea que le leas a un bebé o a un bebé mayor, trata de ser lo más interactivo posible. Esto incluye cambiar la entonación de tu voz, tono y más. Además, use sus manos para expresar la historia para que sea más emocionante. Después de hacer esto, descubrirá que su hijo participará mucho más en la actividad.[3]
  4. 4 Permita que el bebé toque el libro. Mientras que los bebés pueden agarrar el libro y ocasionalmente tocarlo, es probable que los bebés mayores demuestren más interés en tocar el libro. Tocar el libro es importante ya que le permitirá a su hijo obtener un archivo adjunto al libro y tener más influencia en el proceso de lectura.
    • Ayude a los bebés a tocar imágenes y diferentes texturas y superficies en el libro. Elija libros con muchas texturas diferentes y funciones emergentes. También puede probar algunos libros de vinilo o de tela cuando el bebé comienza a agarrar cosas.
    • Anime a los bebés mayores a ayudarlo a pasar la página.[4]
  5. 5 Señalar imágenes. Mientras lee su libro, asegúrese de señalar las imágenes que son el tema de lo que está leyendo. Por ejemplo, si está leyendo sobre una manzana en una página determinada, señale la imagen. Luego, anime a su hijo a señalar y tocar la imagen, también. Al señalar de lo que está hablando, estimulará a su hijo y comenzará a sentar las bases de su vocabulario.[5]
  6. 6 Hacer preguntas. Mientras lee, pare y haga preguntas a su hijo. Las preguntas harán que la experiencia sea más entretenida, interactiva y podría despertar el interés de su hijo. De hecho, no importa si su hijo entiende la pregunta que hace o incluso las respuestas. Las preguntas son más acerca de cómo transformar la experiencia de lectura en un diálogo entre usted y su hijo.
    • Si el tema de su libro es sobre mascotas, pregunte a su hijo si le gustan mejor los perros o los gatos.
    • Si el tema de su libro trata sobre los colores, pregunte de qué color prefieren. Luego, aproveche la oportunidad para señalar colores en toda la habitación.[6]

Método dos de dos:
Elegir buenas condiciones de lectura

  1. 1 Lea a diario Aunque a veces puede ser difícil encontrar tiempo para leer, conviene leerle a su hijo todos los días. En definitiva, todo lo que necesita es usted, su hijo, un libro y unos minutos.[7]
    • No te preocupes por terminar un libro completo.
    • Si tienes poco tiempo, cinco minutos pueden hacer el truco. Si tiene más tiempo, intente leer durante quince o treinta minutos.
  2. 2 Elija un momento en que su hijo esté tranquilo y alerta. Asegúrese de que su hijo haya sido alimentado, tenga un pañal nuevo y haya dormido la siesta. Si su hijo está alerta y de buen humor, sacarán más provecho de la experiencia.
    • Si bien es posible que desee hacer de la lectura parte de su rutina de hora de acostarse / dormir a la hora de dormir, también debe programar el horario de lectura cuando su hijo esté alerta.[8]
  3. 3 Elija una buena ubicación Cuando llegue el momento de leer, busque un lugar bueno y relajante, como la guardería del bebé. La ubicación debe ser relativamente tranquila, tener suficiente luz para leer y debe tener un espacio cómodo para que usted y su bebé se sienten. Evite los lugares donde usted o su bebé se distraerán.[9]
    • Deje que otros miembros de la familia sepan que es hora de leer.
    • Asegure a las mascotas en otra habitación para que no le distraigan ni a usted ni al bebé del tiempo de lectura.
    • Pon tu teléfono celular en silencio o déjalo en otra habitación.
  4. 4 Coloque a su bebé en su regazo. Sitúa a tu bebé para que esté sentado o acostado en tu regazo o contra tu cuerpo. De esta manera, podrás sostener el libro frente a ellos a la altura de sus ojos. Esto es importante, por lo que el bebé podrá sentir su cercanía y ver el libro mientras lo lee.[10]
  5. 5 Encuentra un libro apropiado. Una parte importante de la lectura es asegurarse de tener un libro apropiado para su edad. En última instancia, no todos los libros funcionan mejor para todas las edades. Como resultado, considere la etapa en la que se encuentra su hijo y luego elija un libro que funcione para su hijo.
    • Elija un libro con poco o ningún texto y fotografías grandes y contrastantes para niños de 0 a 6 meses. Los buenos libros para este grupo de edad incluyen "Twinkle, Twinkle", "The Baby's Lap Book" y "The Three Bears Rhyme Book".
    • Para niños de 7 a 12 meses, puede elegir libros que tengan vocabulario que puedan usar todos los días.Por ejemplo, libros que refuerzan palabras como "mamá", "papá", "leche" o "lectura".
    • Elija libros que tengan una o dos oraciones en cada página para niños de 13 a 18 meses.[11]
  6. 6 Deja de leer si el bebé no está contento. Una vez que su bebé haya demostrado que han terminado de leer, debe detenerse. Si fuerza la lectura, creará una asociación negativa y lo inducirá a su hijo en el futuro. En definitiva, si su hijo parece estar hambriento, se ha ensuciado el pañal, está llorando o está distraído, deje de leer.[12]