Vacunar a su bebé en su primer año de vida es una de las maneras más efectivas de mantener a su bebé saludable. Las vacunas, también llamadas vacunas o vacunas, son inyecciones que ayudan al sistema inmune de su bebé a desarrollar una resistencia para combatir ciertas enfermedades antes de que puedan ocurrir. Las vacunas previenen alrededor de 2,5 millones de muertes infantiles cada año en todo el mundo.[1] Conozca qué vacunas se sugieren en su país y cumpla con un programa de vacunación específico para mantener a su hijo saludable y protegido.
Método uno de dos:
Mantenerse en el horario
- 1 Obtenga su bebé su primera vacuna al nacer. Su bebé debe recibir su primera vacuna el día que nacen. Obtenga su bebé su primera dosis de vacuna contra la Hepatitis B dentro de las 12 horas de su nacimiento.[2]
- 2 Obtenga el último horario de vacunación. También se conoce como un calendario de vacunas, esta es una guía creada por su agencia gubernamental que muestra qué vacunas o vacunas recibe su bebé a qué edad. Los horarios de vacunación pueden variar un poco dependiendo de factores como la salud de su hijo y el lugar donde vive. En general, después de la primera inyección de su bebé al nacer, reciben sus vacunas a las edades de 2 meses, 4 meses, 6 meses y 12 meses.
- Puede pedirle a su pediatra un cronograma de vacunación.
- Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. Es el organismo gubernamental que regula el calendario de vacunación en los Estados Unidos. Tienen un calendario descargable disponible en su sitio web.
- El CDC ofrece una herramienta interactiva útil para ayudar a los padres a cumplir con el cronograma. Simplemente ingrese el cumpleaños de su bebé y la herramienta creará un horario personalizado para usted.
- 3 Reserve su próxima cita en cada visita de vacunación. Cada vez que su bebé reciba una vacuna, programe su cita para la próxima.[3] Incluso si no se debe durante varios meses, esto garantizará que no te olvides accidentalmente de programar cualquier vacuna.
- Escriba la fecha de su próxima cita en su calendario de inmediato.
- 4 Mantenga un registro de vacunación. Puede pedirle a su pediatra una tarjeta de registro de vacunación, o puede crear la suya propia. El pediatra de su bebé ingresa cada vacuna en un registro electrónico llamado sistema de información de inmunización, pero también debe conservar una copia de sus propios registros en un lugar seguro.[4]
- Si se muda o cambia de médico, debe poder proporcionar un registro actualizado para que usted y su nuevo proveedor puedan cumplir con el cronograma. Es probable que necesite mostrar un registro de vacunación si inscribe a su hijo en la guardería, así que tenga uno a mano para facilitar el acceso.
- 5 Lleve su registro de vacunación a cada visita al médico. Asegúrese de que el pediatra marque cada disparo que le da a su bebé durante la visita al consultorio.[5]
- 6 Utilice el calendario de puesta al día si se retrasa. Si tiene más de un mes de retraso en las vacunas de su hijo, o si su hijo no ha recibido vacunas antes de que cumplan 4 meses, use el calendario de vacunación de recuperación de los CDC. No es demasiado tarde para que su bebé reciba las vacunas que necesita.[6]
Método dos de dos:
Obteniendo la atención que su hijo necesita
- 1 Obtenga asistencia financiera si la necesita. Si permitir una visita al médico es una barrera para vacunar a su hijo, busque opciones asequibles en su comunidad. Muchos centros de salud comunitarios y clínicas de salud pública ofrecen vacunas de bajo costo, y los grupos que hacen campañas para la vacunación infantil pueden ofrecer vacunas gratuitas a veces. El programa Vacunas para niños proporciona vacunas gratuitas o asequibles a través de un consultorio médico para familias elegibles de bajos ingresos.[7]
- Consulte con su iglesia, clínica de salud pública o centro comunitario para obtener sugerencias sobre las opciones locales de atención asequible.
- Obtenga un seguro de salud para su bebé para que la atención médica sea más asequible. Medicaid es una buena opción para aquellos que luchan financieramente.
- 2 Hable con su proveedor de atención médica sobre sus inquietudes sobre la vacunación. A muchos padres les preocupa que las vacunas puedan enfermar a su bebé o causar problemas como el autismo; otros se preguntan por qué su hijo sano necesita inmunizarse. Hay muchos conceptos erróneos sobre las vacunas. Si tiene alguna pregunta o inquietud, hable con su médico para aliviar su preocupación.
- Las inmunizaciones pueden causar reacciones menores como dolor, hinchazón y enrojecimiento en el sitio de la inyección. Su hijo también puede tener fiebre baja. Esto no es poco común o peligroso, y no es una señal de que la vacuna esté enfermando a su bebé. ¡Es el sistema inmune de su bebé que hace las defensas que necesita! Pregúntele a su médico qué puede hacer para que su bebé esté más cómodo después de recibir una vacuna.
- Otras reacciones adversas más graves, aunque raras, incluyen convulsiones relacionadas con la fiebre, encefalitis, reacción anafiláctica y muerte. Si su bebé presenta síntomas más allá de la reacción menor típica en las horas, días o semanas posteriores a la vacunación, llame a su pediatra inmediatamente.[8]
- 3 Pregúntele a su pediatra sobre la desviación de un horario de vacunación. Cada vacuna tiene condiciones que pueden hacer que su bebé no sea elegible para recibirla. Por ejemplo, la vacuna contra la gripe contiene proteína de huevo. Por lo tanto, si su bebé tiene una alergia grave al huevo, no deberían recibirlo. Su médico puede hacer sugerencias alternativas para proteger a su bebé de enfermedades si no pueden recibir la vacuna.
- 4 Conozca qué vacunas se recomiendan en su país. Las personas en diferentes partes del mundo necesitan vacunas algo diferentes, según qué enfermedades sean más comunes allí. Utilice esta herramienta interactiva creada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para ingresar a su país y obtener un cronograma de vacunación personalizado para cualquier parte del mundo.[9]
- El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades tiene una herramienta similar para los países europeos.[10]
- 5 Obtenga las vacunas sugeridas si viaja con su hijo. Usted y su bebé posiblemente necesitarán vacunas adicionales si viaja a otra parte del mundo. Esto asegurará que ambos estén protegidos de enfermedades en otros países que no tienen en casa. Obtenga información del CDC sobre qué vacunas necesita para viajar.[11]
- Es posible que los niños menores de 1 año no puedan obtener ciertas vacunas. Hable con su médico y considere esto antes de hacer planes de viaje con niños de 0 a 12 meses.
- 6 Aproveche las agencias gubernamentales que brindan vacunas. Algunas partes del mundo tienen menos acceso a las inmunizaciones que otras. Las Naciones Unidas están trabajando para mejorar la cobertura en todo el mundo a través de grupos promotores de la salud como UNICEF, la OMS, Gavi, la alianza de vacunas, otras agencias locales y el plan Reaching Every District (RED).[12] Si vive en un área desatendida, siempre aproveche los servicios proporcionados por estos grupos.
Facebook
Twitter
Google+