Los animales salvajes pueden transmitir enfermedades o incluso dañar potencialmente a su perro. Asegúrese de que esté vacunado contra la rabia y llévelo al veterinario al menos una vez al año para mantener las vacunas al día. Si deja que su perro juegue afuera en su jardín, evite dejarlo sin supervisión. Mantenga el área libre de comida, agua y excrementos para evitar atraer animales. Cuando salga a caminar, manténgalo atado y busque la fauna local. Si lleva a su perro a acampar o ir de excursión, vigílelo de cerca y sea más cuidadoso con la correa, mantenga su sitio limpio y otras precauciones de seguridad.

Método uno de tres:
Manteniendo a tu perro a salvo en tu jardín

  1. 1 Asegúrese de que las vacunas de su perro estén actualizadas. Haga vacunar a su perro contra la rabia y hable con su veterinario sobre cualquier otra inoculación exigida por sus leyes locales. Muchos dueños de mascotas están más preocupados por posibles lesiones que pueden resultar de una pelea o un ataque. Sin embargo, la amenaza más peligrosa que plantea un animal salvaje es la enfermedad.[1]
    • Lleve a su perro al veterinario al menos una vez al año para asegurarse de que sus vacunas estén actualizadas.
  2. 2 Supervisa a tu perro mientras está afuera. Trate de no dejar a su perro en el patio sin supervisión durante largos períodos de tiempo. Tenga especial cuidado si vive en una zona boscosa y tiene un perro más pequeño que podría ser un objetivo más fácil para los depredadores. Además, los expertos en mascotas generalmente recomiendan no dejar a un perro encadenado en el patio por largos períodos de tiempo.[2]
    • Dejar a un perro sin supervisión afuera puede provocar ladridos excesivos, excavaciones, intentos de fuga potencialmente peligrosos y otros problemas de comportamiento relacionados con la ansiedad.
  3. 3 Mantenga su jardín limpio. Evita dejar afuera la comida y el agua de tu perro, ya que puede atraer a animales salvajes como mapaches, ratas y coyotes. Limpia a tu perro cuando va al baño, ya que los excrementos pueden atraer perros callejeros y otros intrusos salvajes no deseados.[3]
    • Limpie cualquier escombro en su jardín que pueda ofrecer a los animales silvestres escondites. Si tienes un perro pequeño, toma precauciones adicionales si vives en un área poblada por búhos, halcones grandes y otras rapaces de gran tamaño. Evite dejar a su perro sin supervisión y elimine la materia vegetal excesiva y otros posibles materiales de anidación de su patio.[4]
  4. 4 Esté atento a los animales extraviados e infórmales sobre el control de los animales. Los perros y gatos callejeros, así como los animales salvajes como los mapaches, los zorrillos y los zorros, pueden transmitir la rabia. Presta atención a los signos de la rabia en cualquier animal callejero con el que te encuentres, incluida la agresividad, la formación de espuma en la boca y los movimientos erráticos. Llame a su oficial local de control de animales si nota animales callejeros, especialmente si exhiben síntomas de rabia.[5]
    • Si ve un coyote en su área, es importante evitar que se sienta cómodo con las personas. Los depredadores como los coyotes y los zorros son más peligrosos cuando no temen a las personas y las mascotas. Use técnicas de novatadas de coyotes para asustarlos: póngase de pie, pise, grite, rocíe con una manguera de jardín, golpee objetos juntos o arroje piedras hacia (no a) el coyote.[6]
  5. 5 Haga un botiquín de primeros auxilios para mascotas. Incluya gasas, pinzas, guantes sin látex y solución salina en su kit. Mantenga un bozal a mano, ya que un perro herido puede confundirse y ser peligroso para usted y otras personas cercanas.[7]
    • Además de estos artículos específicos para animales, conserve copias de los registros médicos de su perro, incluida la prueba de vacunación contra la rabia, e información de contacto importante, como el número de su veterinario, una clínica veterinaria de emergencia local y el centro de control de envenenamiento ASPCA: (800) 426-4435.[8]
    • Mantenga el kit en un lugar fácilmente accesible mientras está en su casa, y llévelo consigo si viaja con su perro.

Método dos de tres:
Proteger a su perro mientras camina

  1. 1 Mantenga a su perro con correa. Evite dejar a su perro sin correa a menos que lo haya llevado a un parque para perros u otra área segura y vallada. Nunca suponga que su perro escuchará las órdenes vocales cuando esté fuera de su correa. Recuerde que la correa es un medio importante para entrenar a su perro y mantener su estado como alfa.[9]
  2. 2 Nunca permita que su perro interactúe con animales salvajes de ninguna especie. Cuando pasees a tu perro, siempre mantente atento a lo que sea que esté oliendo o tratando de investigar. Haga su mejor esfuerzo para mantenerlo fuera de los agujeros o recintos que se asemejan a madrigueras o guaridas de cualquier tipo. Además de evitar un encuentro casual con una serpiente venenosa, evitarás que tu perro ataque a un roedor u otros animales pequeños.[10]
    • Atacar a un animal pequeño presenta el riesgo de enfermedad e interrumpirá el entrenamiento de obediencia de su perro.
  3. 3 Lleve un bastón o dispositivo para hacer ruido. Si vives en un lugar arbolado o conoces a los coyotes, zorros u otros animales salvajes potencialmente peligrosos en tu área, prepárate para un encuentro con anticipación. Puede golpear un bastón en el suelo o tirarlo en la dirección del animal para asustarlo.[11] Los creadores de ruido como silbatos, cuernos de aire y campanas también son útiles para ahuyentar a los animales potencialmente peligrosos.[12]
    • Sujeta la correa de tu perro con fuerza o recoge a tu perro pequeño si ves un animal salvaje.
    • Recuerde, nunca le dé la espalda a un coyote, zorro, lobo u otro animal salvaje. Darles la espalda los alentará a perseguirlos.

Método tres de tres:
Acampar y caminar con su perro

  1. 1 Habla con un veterinario sobre los riesgos específicos de tu lugar de campamento. Llame a su veterinario y cuéntele sobre sus planes para el exterior. Pregúnteles si están familiarizados con pulgas, garrapatas, parásitos del corazón y otros riesgos para la salud asociados con su campamento o lugar de excursión. Si la ubicación está muy lejos o su veterinario habitual no está familiarizado con usted, considere ponerse en contacto con uno que se encuentre cerca de su lugar de campamento o de excursión.[13]
    • Aplique preventivos del parásito y cualquier otro medicamento recomendado por el veterinario antes de partir en su viaje.
  2. 2 Doble las precauciones que normalmente tomaría en casa. Al acampar o ir de excursión con su perro, trate de ser aún más completo sobre todas las precauciones de seguridad de rutina. Mantenga a su perro con correa, supervisado, y no permita que persiga o interactúe con los animales que encuentre.[14]
    • Mantenga su campamento limpio: mantenga todo el alimento para humanos y mascotas en recipientes a prueba de fauna silvestre, no deje agua afuera y limpie después de que su perro vaya al baño.
    • Traiga objetos de novatadas de la vida silvestre, como un cuerno de aire u otro generador de ruido.
  3. 3 Hazte parecer alto y fuerte si te encuentras con un animal salvaje. Es más probable que conozcas a un depredador más grande, como un lobo o un oso, al acampar o ir de excursión que en un paseo por tu vecindario. Recuerde sujetar la correa de su perro grande o levante lentamente y sostenga a su perro pequeño en sus brazos. Haga que parezca lo más grande posible parándose de pie y, si tiene un brazo libre, levantándolo por encima de su cabeza.[15]
    • Use su generador de ruido para espantarlo o gritar, "¡Oye! ¡Vete!"
    • Considera llevar contigo un aerosol de oso o pimienta.
    • Los encuentros peligrosos con depredadores más grandes son bastante raros, por lo que no debe preocuparse ni dejar que la posibilidad le impida hacer una divertida actividad al aire libre con su mascota. Sin embargo, es mejor estar al tanto de los encuentros con animales salvajes peligrosos y los riesgos como parásitos o enfermedades al acampar y caminar con su mascota.[16]