Cada portero tiene una manera diferente de prepararse para los juegos. Algunas partes de sus rutinas son similares. Sin embargo, cada rutina no es igual en todos los sentidos. La parte difícil es que los arqueros encuentren una rutina que les funcione y se apeguen a ella. La siguiente rutina puede no ser perfecta para usted, pero puede brindarle algunas ideas sobre las cosas que podría incorporar a su rutina personal. Sin embargo, lo más importante que debes recordar es no cambiar tu rutina una vez que la tengas, no importa cuán grande sea el juego.

Pasos

  1. 1 La preparación para un juego no comienza el día del juego, sino durante las prácticas de la semana anterior. Haga todo lo posible para detener todo en la práctica. Asegúrate de no quedarte despierto hasta tarde la noche anterior al juego y no dormir, dormir en él te hará sentir letárgico. Cuando se despierte, tome un buen desayuno, tal vez algunos huevos, pan tostado, tocino y un vaso de jugo o leche. Dependiendo de a qué hora es tu juego, también debes comer un buen almuerzo. Durante el tiempo anterior al juego, intenta utilizar la menor cantidad de energía posible antes de dirigirte a la pista. Cuando llegue a la pista, necesitará una pelota medicinal, preferiblemente de cinco a ocho libras, y dos balones de raqueta o pelotas de tenis, dependiendo de su nivel de habilidad.
  2. 2 Llegue a la pista al menos una hora antes de salir al hielo. Esto le dará mucho tiempo para hacer todo lo que se requiere para prepararse. Primero, debe dejar su teléfono y cualquier otro dispositivo que lo distraiga en su automóvil, en su hogar o con un padre o amigo de confianza. Esto no incluye dispositivos para reproducir música. Cuando llegue a la pista, coloque todo su equipo en el vestuario. Tome el balón medicinal y enrósquelo contra los músculos de las piernas, la espalda y los abdominales. Esto te ayudará a relajarte y a ayudarte a desarrollar músculo. Luego saca tus dos bolas de raqueta y encuentra una pared sólida y plana. Párese a dos o tres pies de la pared. Lanza las bolas contra la pared, una a la vez, ambas al mismo tiempo o alternando entre las dos. Esto funcionará en su tiempo de reacción y calentará sus brazos y ojos. Haga esto lo más rápido posible hasta que le queden unos treinta minutos. Ve al vestuario y pon el resto de tu equipo, excepto tu casco y guantes. Utiliza este tiempo para prepararte mentalmente. Para estar mentalmente preparado, hay varias cosas que puede hacer, pero depende de usted decidir qué es lo mejor para usted.
    • Puedes sentarte en un lugar tranquilo y silencioso.
    • Otros prefieren tocar música para que se entusiasmen.
    • No importa cómo te prepares mentalmente, siempre debes asegurarte de no pensar en nada que no sea hockey. Piensa en pensamientos positivos y nunca mires el próximo juego de forma negativa. También puedes intentar imaginarte mentalmente haciendo salvaciones.
  3. 3 Cuando llegue el momento de subirse al hielo, póngase el casco y los guantes y agarre su bastón. Espere a que el resto del equipo esté listo para salir y asegúrese de estar en la delantera. Tienes que llevar al equipo al hielo.
  4. 4 Cuando te subas al hielo, usa los disparos durante el calentamiento para prepararte. Debería haber al menos tres oleadas de disparos. Use la primera ronda de disparos para trabajar la parte superior de su cuerpo. Durante la segunda ronda de disparos baje y trabaje en sus piernas y movimiento. La tercera y las rondas restantes solo se enfocan en la reacción, el control de rebote, el movimiento y la salvación. Después del calentamiento vaya al banco, tome una copa, escuche la charla del entrenador y luego regrese a su red. Ahora debería estar preparado tanto física como mentalmente para jugar.