Los currículos escolares están diseñados para enseñar a los estudiantes una amplia gama de materias para prepararlos para la vida fuera de la escuela. Lamentablemente, habrá algunos temas que le gustarán y otros que no le gusten. Aprender a lidiar con una materia escolar que no le gusta es una parte importante del progreso en la escuela. Puede hacerlo cambiando sus hábitos de estudio y utilizando herramientas motivacionales e incentivos para cambiar su enfoque del tema que no le gusta.

Parte uno de tres:
Cambiando su enfoque al tema que no le gusta

  1. 1 Contextualizar el tema Siéntate y pregúntate por qué no disfrutas de este tema en particular. Cuando puede identificar y contextualizar lo que no le gusta de un tema, puede tomar medidas para corregir el problema.
    • Pregúntese por qué tiene problemas con este tema o clase. ¿Es porque no entiendes un concepto en particular? ¿No te gusta el instructor o tus compañeros de clase? ¿Estas aburrido?
    • Si no le gusta el instructor o sus compañeros de clase, entienda que las clases tienen límites de tiempo. Incluso si no te gusta la clase ahora, es posible que tengas un instructor o compañeros de clase diferentes el próximo semestre o año.
  2. 2 Habla con tu instructor sobre tus sentimientos. Se honesto con tu profesor y explícale que nunca te ha interesado mucho el tema. Pregúnteles si pueden proporcionar recursos, como artículos de periódicos, documentales, sitios web o videos de YouTube, que pueden ayudarlo a involucrarse con el tema.
    • Su maestro puede incluso demostrar cómo el sujeto se aplica a situaciones del mundo real, lo que puede ayudarlo a ver el valor de la clase.
  3. 3 Alivia el aburrimiento en el aula. Si estás aburrido con la clase, busca formas de mejorar tu comprensión del tema. Por ejemplo, puede pedirle al instructor libros o materiales que pueda leer y usar fuera del aula.
    • Si estás aburrido en clase porque ya comprendes el material, pregunta a tu maestro si te mudarás a un curso más avanzado sobre el tema.
    • Intente estudiar con un amigo que esté interesado en el tema y disfrute aprendiendo sobre los conceptos con los que puede luchar.
  4. 4 Reconoce la importancia del tema. Los currículos escolares están diseñados para enseñar una amplia gama de asignaturas, pero cada materia que aprende es importante de alguna manera. Pregúntale a un amigo, pariente o incluso a un maestro por qué disfrutan el tema. Sus respuestas pueden ayudarlo a cambiar su perspectiva de la clase.
    • Cuando identificamos la importancia de un tema, es más probable que dediquemos tiempo a aprender el tema y sus conceptos. Busque los conceptos clave que son importantes para el curso para comprender por qué es importante.
    • Por ejemplo, si no te gusta el inglés como materia, entiende que las clases de inglés son una excelente forma de aprender habilidades de comunicación y de relacionarte con los demás.
  5. 5 Identificar habilidades traducibles Las habilidades traducibles son conceptos que una persona enseña que se pueden aplicar a otro tema o situación.
    • Identificar las habilidades traducibles lo ayuda a comprender cómo encaja el sujeto con el panorama general. Si bien es posible que no necesite conocer los gases nobles fuera de la clase de química, estudiar química le enseñará cómo identificar reacciones y comprender cómo las sustancias interactúan entre sí. Esto es importante cuando cocina o mezcla productos de limpieza. [1]
    • Las habilidades traducibles que aprendes en un tema pueden ayudarte a tener éxito en otros temas o en tu vida cotidiana.
  6. 6 Busca cosas que tú hacer disfrutar de la clase o tema. Al centrarse en los aspectos positivos de la asignatura, puede cambiar su enfoque de aprendizaje y estudiar el tema. Y si bien los excelentes profesores pueden hacer incluso más interesantes las asignaturas aburridas, incluso si no disfruta del estilo del profesor, puede cambiar su propia perspectiva sobre el tema.
    • Por ejemplo, si tiene dificultades con el inglés, busque libros y documentos para leer y escribir informes que estén dedicados a temas que le gustan, como la historia o el arte.

Parte dos de tres:
Estudiando un tema que no te gusta

  1. 1 Crea un plan de acción. A menudo, no nos gusta un tema determinado porque nos cuesta aprender el tema o ciertos conceptos clave. Cuando tratamos de lidiar con el desagrado de un tema, no podemos ignorar el hecho de que todavía tenemos que aprender el tema. [2]
    • Un plan de acción es esencialmente un plan para garantizar que pase el curso y complete todo su trabajo. Aunque cambiar sus sentimientos sobre el tema puede llevar tiempo, debe continuar siguiendo el programa de la clase y completar el trabajo asignado.
    • Trabaje con su instructor para crear un horario que seguirá para recuperar el trabajo perdido y completar tareas futuras.
    • Establezca un horario de estudio que use incentivos para reforzar positivamente sus hábitos de estudio. Siga este programa de estudios y solicite al instructor fuentes externas para mejorar su comprensión del tema, como conferencias en línea o artículos interesantes.
  2. 2 Incentivar aprender el tema. Incentivar el tema va de la mano con la identificación de sus motivadores. Cuando incentivas realizar tareas que no te gustan, te motivas para completarlas.
    • Los economistas argumentan que los incentivos más altos conducen a un mayor esfuerzo y niveles de rendimiento más altos. [3]
    • Los incentivos no necesitan ser materiales o monetarios. Los incentivos intrínsecos, o incentivos que provienen del estudiante, también son motivadores. Un ejemplo de un incentivo intrínseco sería una sensación positiva que obtienes cuando recibes una buena nota en un trabajo que te alienta a trabajar tan duro en la próxima tarea. [4]
  3. 3 Asocia el tema con algo que te gusta. Si estás luchando por incentivarte a estudiar el tema, trata de establecer asociaciones positivas con el tema que no te gusta con algo que te gusta.
    • Un estado de ánimo positivo puede ayudar a tu cerebro a pensar de forma más creativa y te ayuda con tu capacidad para recordar hechos.[5]
    • Cuando te incentivas constantemente y te motivas a aprender un tema que no te gusta, comienzas a asociar el estudio del tema con cosas positivas que te gustan. Por ejemplo, si te invitas a tu merienda favorita después de estudiar el tema que te disgusta, eventualmente puedes asociar el estudio con los sentimientos felices que obtienes cuando tienes tu comida favorita.[6]
  4. 4 Contrate a un tutor si es necesario. Si no le gusta el tema porque está teniendo problemas para aprender un concepto, solicite ayuda adicional al instructor o considere contratar a un tutor.
    • Si su escuela ofrece servicios de tutoría o si hay un Asistente de enseñanza (TA) para el curso, aproveche estos recursos.
    • Un tutor puede ayudar a explicar conceptos complicados si tiene problemas para comprenderlos y puede ayudarlo a resolver sus tareas.
    • Los asistentes docentes generalmente se encuentran en cursos universitarios avanzados. A menudo tienen horas de oficina donde los estudiantes pueden venir y hacerles preguntas sobre el material del curso. Aproveche este recurso si está disponible para usted. Los profesores también pueden tener horarios de oficina para sus alumnos.

Parte tres de tres:
Reconsiderando tu estilo de aprendizaje

  1. 1 Identifica tu estilo de aprendizaje. Su estilo de aprendizaje se refiere a las formas en que aprende mejor las cosas, y puede usar su estilo para probar diferentes métodos de estudio para obtener los mejores resultados. Una vez que haya identificado cuál es su estilo de aprendizaje, puede experimentar con él.
    • Hay varios estilos de aprendizaje diferentes, y las personas pueden tener diferentes estilos de aprendizaje para diferentes materias. Trabaja con un instructor o un consejero escolar para identificar tu estilo de aprendizaje, si no sabes cuál es tu estilo de aprendizaje.[7]
    • Si encuentra que está luchando por aprender el tema de la manera en que lo enseña el instructor, su estilo de aprendizaje puede ser diferente al que enseña el instructor.[8]
    • Puede ser difícil cambiar por completo su estilo de aprendizaje para adaptarse al estilo del instructor. Sin embargo, puede solucionar este problema utilizando diferentes estilos de aprendizaje para abordar un tema fuera del aula. Por ejemplo, si aprende verbalmente y aprende mejor escuchando conferencias, puede usar Internet para encontrar conferencias grabadas sobre un tema que le cuesta aprender.
    • Si eres un aprendiz social, y aprendes mejor en grupos y trabajando con otros, forma un grupo de estudio con otros estudiantes sociales para estudiar un tema en particular.
  2. 2 Encuentra la motivación. Cuando te sientes motivado para aprender un tema o concepto, es más probable que le dediques tiempo. Debe determinar si está más motivado por los éxitos a largo plazo o si prefiere la gratificación a corto plazo.
    • Si está más motivado por los éxitos a largo plazo, recuerde que su calificación en este curso tiene un impacto en su GPA general. Su GPA influirá en los programas de educación superior a los que es aceptado, oportunidades de pasantías, oportunidades de trabajo y su graduación.
    • Si está más motivado por la gratificación inmediata o de corto plazo, use objetos pequeños para recompensarse. Por ejemplo, si pasas una hora estudiando el tema que no te gusta, puedes recompensarte con quince minutos de navegación por Internet.
    • Cuando comienza a sentirse frustrado con el tema, es útil recordarse que su éxito en este curso tendrá consecuencias positivas más adelante. [9]
  3. 3 Prioriza tu horario. Cuando no nos gusta un tema, puede ser tentador ignorar el problema y evitar trabajar en el tema. Dé prioridad al aprendizaje del tema que le disgusta o que tiene dificultades con respecto a materias que le resultan naturales.
    • Siempre completa tu tarea. La tarea es una excelente manera de poner a prueba su conocimiento sobre un tema y evaluar su capacidad para usar ciertos conceptos.
    • Participa en las discusiones de la clase y durante las lecciones. Participar activamente con el tema puede ayudarlo a confrontar su aversión y comprender con qué conceptos tiene problemas.