Mantenerse preparado para cualquier desastre natural con el que se encuentre puede ayudarlo a sentirse a gusto. Su discapacidad no tiene que inhibirlo en una situación de emergencia, especialmente si planea con anticipación. Manténgase tranquilo y desarrolle un plan de supervivencia para que pueda sentirse seguro y bien equipado durante un terremoto.

Parte uno de cuatro:
Dejar caer y cubrir tu cuerpo

  1. 1 Súbete a tus manos y rodillas. Si está en una silla de ruedas o no puede hacerlo, no se preocupe. Agacha la cabeza y cúbrete el cuello para protegerlo de los desechos. Manténgase tan cerca del suelo como sea posible.[1]
  2. 2 Protege tu cabeza y cuello del daño. Use un brazo para cubrir su cuello y cabeza, en caso de que los objetos cercanos caigan sobre usted. Si es posible, sostenga una almohada o cojín sobre su cuello para protegerlo de los desechos.[2]
  3. 3 Cubre tu cuerpo. Escóndete debajo de una mesa o escritorio si estás cerca de uno cuando comience el terremoto. Utilice elementos circundantes, como cojines para el sofá, para cubrir la mayor cantidad posible de su cuerpo, ya que el movimiento sísmico es impredecible y puede hacer que muchas cosas caigan de las paredes o se caigan al suelo.[3]
  4. 4 Aférrate a algo seguro. Usa una mano para estabilizarte y evitar que te lastimes. Si es posible, manténgase cerca del suelo en un espacio despejado y alejado de los muebles.[4]

Parte dos de cuatro:
Adaptarse a su situación

  1. 1 Mantente en su lugar durante el terremoto. Los desastres naturales se producen sin previo aviso, y exponerse a las condiciones externas puede ser peligroso. Quédese quieto y espere a que termine el terremoto antes de moverse, a menos que se encuentre en un lugar peligroso.[5]
    • Si se encuentra en una ubicación insegura, conduzca o camine hasta la ubicación interior más cercana. Encontrar cobertura para la cabeza y el cuello para evitar la caída de escombros es el movimiento más importante que puede hacer.
  2. 2 Usa el entorno a tu favor. Si está en la cama cuando ocurre el terremoto, quédese allí. Use sus almohadas para cubrir su cabeza y cuerpo. Sostenga en la cabecera o en los bordes de la cama, para que no se desprenda durante la sacudida.
  3. 3 Mantenga a su animal de servicio cerca. Si tiene un animal de servicio con usted, manténgalo cerca de usted. Dile a tu mascota "siéntate y quédate".
    • Recuerde que su animal puede estar asustado e inseguro de lo que está pasando, así que manténgalo tranquilo acariciando su cuerpo y usando una voz suave y tranquilizadora para dar órdenes.

Parte tres de cuatro:
Reaccionando después del terremoto

  1. 1 Controle a usted mismo por una lesión. Mueva sus extremidades y asegúrese de que no haya daños por la caída de objetos durante el terremoto. Si está sangrando, envuelva la herida en una toalla o vendaje para detener el flujo de sangre. Obtenga atención médica lo más pronto posible.[6]
  2. 2 Evite usar los elevadores. Los elevadores no son seguros porque es posible que se haya apagado durante el terremoto y que pueda quedar atrapado. Busque rampas accesibles si está discapacitado. Si solo hay escaleras o ascensores disponibles, simplemente quédese en el lugar y espere la ayuda.
  3. 3 Muévete con precaución. Las réplicas son posibles, así que ten cuidado de moverte de un lugar seguro. Cuando sea seguro hacerlo, diríjase al área designada para la evacuación y espere a que los rescatistas lo recojan. Manténgase al tanto de entornos inestables y posibles objetos que caen.[7]
    • Tenga cuidado con vidrios rotos u otros desechos que puedan resultar de un terremoto. Si tiene una discapacidad de la vista, tenga en cuenta que los muebles han cambiado durante el terremoto, por lo que es más seguro quedarse donde está hasta que llegue la ayuda.
  4. 4 Póngase en contacto con su red de soporte personal. Esta red de personas debe residir a corta distancia de su hogar y tener acceso a su hogar. Entregue las llaves de repuesto solo a las personas en quienes confía y a aquellas que puedan ofrecer asistencia inmediata.

Parte cuatro de cuatro:
Creando un Plan de Desastre

  1. 1 Planee una forma de aprender información sobre terremotos. Si es sordo, por ejemplo, asegúrese de que su televisor esté configurado correctamente para mostrar leyendas, de modo que pueda estar al día con las advertencias de tormentas. Configure un plan con una fuente confiable para obtener actualizaciones vitales en situaciones de emergencia.[8]
  2. 2 Tómese el tiempo para desarrollar un plan de seguridad. Su plan debe ser atendido para su discapacidad específica. Repase el plan con su cuidador o con alguien en quien confíe, y comuníquese con todas las personas que viven en su hogar para que todos estén en la misma página si ocurre tal evento.[9]
    • Haga un plan que involucre puntos de encuentro, personas de contacto y formas de comunicarse con ellos, y escapes rutas que incluyen ubicaciones accesibles para sillas de ruedas, si eso es aplicable a usted.
  3. 3 Configure los kits de suministros de emergencia. Cree kits para emergencias que incluyan elementos clave como botellas de agua, linternas y baterías. También se debe incluir un botiquín de primeros auxilios. Distribuya estos kits alrededor de su lugar de residencia para que pueda estar preparado para cualquier situación.
  4. 4 Crea un ambiente de vida seguro. Asegure su espacio asegurándose de que su entorno no lo ponga en peligro. Mantenga sus estanterías o estanterías altas lejos de su cama, sofá o cualquier otro lugar donde se siente o duerma. Nunca deje aparatos eléctricos enchufados cerca de la bañera o el fregadero.