El racismo es profundo. Puede parecer una tarea insuperable superar el racismo institucional, y puede ser inquietante confrontar tendencias racistas dentro de uno mismo. No pienses que debes hacerlo solo. Encuentra tu voz, edúcate y habla sobre la injusticia que enfrentas. Sé audaz y actúa con intención.

Método uno de tres:
Lucha contra el racismo institucional

  1. 1 Edúcate y mantente informado. Considere que los estereotipos racistas están arraigados en gran medida en la ignorancia. Enfrenta la ignorancia con la verdad. Trate de mantener la mente abierta y salga de su caparazón. Aprenda todo lo que pueda sobre otras razas, idiomas y culturas. El conocimiento es poder.
    • Lea las noticias, y no solo de una sola fuente. Absorbe tantas perspectivas como sea posible. Considere cuidadosamente el sesgo detrás de cada fuente.
    • No lo retenga. Comparta lo que aprende con sus amigos, familiares y la comunidad en general. Aprende a enseñar y enseñar a aprender
  2. 2 Manten una mente abierta. Acepta a los demás, incluso si no te aceptan. No necesita convertirse en "daltónico", puede apreciar otras razas y culturas por las cosas que los hacen únicos. Abraza la singularidad donde sea que la encuentres.
  3. 3 Encuentra tu voz La ubicuidad de Internet hace que sea más fácil que nunca llegar, enseñar e influenciar a las personas más allá de su esfera normal de interacción. Comparta artículos, videos e historias en las redes sociales; encuentre una plataforma para bloguear o transmitir su perspectiva; y generalmente considere cómo su presencia en línea alimenta o combate el diálogo del desequilibrio racial. Busque maneras de hablar en su escuela, vecindario o lugar de trabajo. Anime a su familia, amigos y a la comunidad en general a que respeten y acepten a personas de diferentes orígenes.
    • Tenga cuidado con qué y cómo publica en Internet. Su presencia en las redes sociales puede ser mucho más pública de lo que cree. Considere los peligros de provocar la ira de extraños anónimos.
  4. 4 Crear dialogo Escucha a personas de todas las razas y culturas. Encuentra las cosas que tienes en común y trata de entender qué te divide. Esfuércese por curar una conversación pacífica y respetuosa sobre el racismo, una conversación que incluye y empodera a todos.[1] Comprenda que debemos trabajar en colaboración para crear una sociedad segura e inclusiva.

Método dos de tres:
Lidiando con el racismo cotidiano

  1. 1 Intervenir. No tomes el racismo acostado. Actúe según sus creencias cuando encuentre injusticias, prejuicios y palabras discriminatorias. Llama racismo cuando lo veas. ¡No tengas miedo de defender a alguien que está siendo maltratado!
    • Usa tus palabras, tus acciones y tu influencia. Sé audaz, pero sé inteligente. Piense en cómo puede intervenir de manera más efectiva.
  2. 2 Documentar la injusticia Tenga a mano la cámara del teléfono celular y tome imágenes de video de cualquier acto opresivo que encuentre. No tengas miedo de grabar en video a los agentes del orden si sientes que están oprimiendo física o verbalmente a un civil. Transmite la verdad. Muestre a sus amigos, cuente su historia y publique su metraje en las redes sociales.
    • Si no puede tomar video, tomar fotos o grabar audio. Por lo menos, presta mucha atención. Una cuenta sólida de testigo es mejor que nada.
  3. 3 Mantenga una cabeza nivelada. Reaccionar con intención y abogar sin violencia. Trate de mantener la calma y mantener la perspectiva frente a la profunda injusticia. No te rindas, pero ten cuidado con actuar con enojo. A veces, lo mejor es reducir la velocidad y considerar la forma más sensata de reaccionar. Encuentra tu centro y trabaja desde allí.[2]
    • Tome nota de activistas no violentos como Rosa Parks, Nelson Mandela, Harriet Tubman y Martin Luther King, Jr .: hombres y mujeres que utilizaron su frustración para ayudar a las personas en lugar de perjudicar a las personas. Cada día, sé el cambio que deseas ver en el mundo.
    • Considere que la ira a menudo surge en respuesta a la ira. Pregúntese si, al reaccionar con enojo, realmente resolverá el problema, o solo alimentará el ciclo de la ira.

Método tres de tres:
Colocar el racismo en contexto

  1. 1 Comprenda por qué las personas se ven diferentes. La historia de la humanidad es la historia de personas que, durante decenas de miles de años, emigraron de las junglas y sabanas de África a Europa y a la vasta extensión de Asia; navegaba a través de las islas de Polinesia usando las corrientes y las estrellas; siguió la cacería desde Siberia, cruzando el estrecho congelado sobre Bering, en el salvaje corazón de América del Norte; y se extendió, aproximadamente 10.000 años atrás, a lo largo de todo el gran continente de las Américas, hasta la punta de Tierra del Fuego. En todas partes donde fueron nuestros antepasados, algunas personas se quedaron y algunas personas finalmente se mudaron. Las personas que se quedaron adaptadas a su entorno de varias maneras: personas en climas fríos del norte, con menos luz solar, desarrollaron cabello y piel más claros, mientras que las personas que vivían cerca del ecuador tendían a producir más melanina para proteger su piel del calor.
    • Mira más allá de estas diferencias superficiales en el ADN subyacente. De Sudáfrica a Siberia, Bangladesh a Brasil, Canadá a Kazajstán: todos somos genéticamente homo sapiens. Todos somos humanos.[3]
  2. 2 Considera la raíz evolutiva del racismo. Algunos dicen que hubo una vez una función tribal a la discriminación. Cuando los grupos de humanos ancestrales y premodernos competían por recursos y territorio, puede haber un peligro real en la incapacidad de distinguir entre alguien de su "propio" grupo y alguien de otro grupo potencialmente hostil. Los estudios de nuestros primos simios han mostrado una desconfianza similar para las personas de un grupo rival. Considere la idea, sin embargo, de que, si bien esta tendencia puede haberse producido por una razón, no es necesariamente algo que todavía sirva a nuestra especie.[4]
  3. 3 Lea sobre la historia moderna del racismo institucional. Comprenda que las leyes y las personas han discriminado contra los seres humanos no blancos durante cientos de años en los Estados Unidos solamente. Aprenda sobre la abolición de la esclavitud, los años de Jim Crow, el Movimiento por los Derechos Civiles, y las formas en que el racismo ha persistido a través de todo. Lea las noticias y manténgase actualizado sobre los eventos de los que la gente está hablando. Aprenda a conectar los puntos de injusticia sistémica del pasado al presente.[5]