La mayoría del peso corporal de un niño está genéticamente determinado, y como padre, no podrás controlarlo. Sin embargo, puede fomentar hábitos saludables y una buena autoestima en su hijo, para que aprendan a amar y cuidar bien sus cuerpos.
Pasos
- 1 Evite confiar en la televisión y la comida chatarra para sus hijos. Es natural pasar tiempo frente a la televisión y obtener comida rápida a veces, pero no permita que se convierta en un hábito familiar. Esto es malo para todos ustedes.
- Cuando quieras sacarlos de tu cabello, saca algunos juguetes geniales o libros de la biblioteca. Deje la televisión para ocasiones especiales, o solo ciertas horas del día.
- Si no tiene tiempo para cocinar, compre comidas saludables para microondas en lugar de comida rápida constante.
- 2 Aliente una alimentación saludable. Mantenga alimentos saludables en su refrigerador y despensa, tanto para las comidas como para los refrigerios. Hable sobre mantener una dieta balanceada como meta (no eliminar toda la grasa) y sobre comer dulces con moderación.
- Déjalos que te vean comiendo alimentos saludables.
- Evite controlar demasiado a su hijo, o comerán en exceso cuando no esté mirando. Esto puede conducir a serios problemas de salud.
- Manténgase alejado de las dietas de moda, las dietas que limitan sus grupos de alimentos, o las dietas estrictas en general. Si constantemente habla de controlar su peso, su hijo aprenderá que la grasa corporal y los dulces son algo de lo que sentirse culpable, lo que lleva a un comportamiento poco saludable.
- 3 Ayude a su hijo a encontrar la manera de hacer ejercicio. Los niños sociales pueden disfrutar de deportes en equipo, y usted puede ayudarlos a descubrir una actividad a la que les gusta asistir. Si no les gusta, permítales dejar de fumar, para que no asocien el ejercicio con sentimientos negativos.
- 4 Pruebe deportes individuales o en grupos pequeños. Puede que a algunos niños no les guste la naturaleza competitiva o altamente social de los deportes, y eso está bien; es más importante que aprendan que el ejercicio es divertido.
- Juega deportes de patio trasero como una familia, sin llevar la cuenta.
- Haga que los deportes sean un esfuerzo colaborativo: trabajen juntos para hacer canastas, pasen una pelota o practiquen golpear una pelota de béisbol.
- Mantenga los juguetes al aire libre y los equipos deportivos fácilmente accesibles para que puedan salir y jugar cuando quieran.
- Intente incorporar caminatas y caminatas a la rutina familiar.
- 5 Enseña buenos hábitos alimenticios. Es importante que todos los niños tengan una actitud saludable hacia la comida.
- Llene entre 1/3 y 1/2 de su plato con frutas y verduras.
- Aliéntelos a comer algo si sienten hambre.
- Explique la importancia de comer solo cuando tienen hambre.
- 6 Ayúdalos a elegir comida. Llévelos con usted a la sección de frutas y verduras de la tienda de comestibles, y pídales que elijan algunos alimentos para usted. Si sus hijos tienen algo que decir sobre qué alimentos saludables llegan a casa, es más probable que coman esos alimentos.
- 7 Explique que todos deben hacer ejercicio y amar a su cuerpo, independientemente de su tamaño. Los niños regordetes pueden sentirse avergonzados por su peso, haciendo que duden en hacer ejercicio y que no cuiden bien sus cuerpos. No dejes que esto suceda. Dígales que pueden ser personas fuertes y activas, y que su cuerpo no es un obstáculo.
- Expóngalos a imágenes de atletas gordos y niños gordos que hacen ejercicio y se divierten.
- Nunca critiques ni burles de las personas por ser gordo.
- Ama a tu cuerpo y deja que tus hijos te vean amando tu cuerpo. Ellos te copiarán.
- Limite su exposición a revistas y TV, ya que estos tienen moldes excesivamente finos y pueden reducir la autoestima.
- 8 Déles sus propias tazas de agua, y repítalas a menudo. La hidratación les ayudará a mantenerse enérgicos y saludables. Las tazas de agua pueden venir con usted en el automóvil, en la mesa y en sus escritorios.
- Ve a la sección de botellas de agua de una tienda. Haga que escojan una taza reutilizable con su color favorito, posiblemente con personajes de dibujos animados. Esto ayudará a que se sienta como si fuera de ellos.
- Los niños pequeños, o los niños con habilidades motrices deficientes, pueden necesitar una copa para evitar derrames.
- Agregue una paja tonta para que sea más divertida y fácil de beber.
- 9 Habla sobre comida chatarra. Explique que todos comen algo, y que está perfectamente bien mientras lo coman con moderación. Permítales tener una cantidad pequeña / moderada en un cierto período de tiempo (por ejemplo, galletas para un refrigerio a la hora de acostarse). Hágales saber que no hay nada de qué avergonzarse.
- Si un hermano es más delgado, no les des más comida chatarra que sus hermanos más gordos. Esto los molestará y hará que los hermanos más gordos sientan que también se merecen más.
- Si su hijo está escondiendo comida chatarra, haga que los bocadillos saludables estén más disponibles, especialmente aquellos con grasas más saludables (por ejemplo, nueces y mantequilla de maní). Hábleles si la alimentación sigilosa se convierte en un problema.
- Nunca dejes que te vean culpable por la comida. ¡Coma el postre y disfrútelo!
- 10 Aliente su autoestima. No haga que su alabanza dependa del peso perdido; enséñeles a amarse siempre tal como son. Cuando aman a sus cuerpos, los cuidarán bien, cualquiera que sea su peso.
- Cuando vaya de compras con su hija, ayúdela a elegir un lindo traje de baño. Elogie lo adorable que se ve y bromee suavemente sobre defenderse de los niños en la piscina. Esto la ayudará a aprender que está bien nadar en público.
- Nunca pronuncie la palabra "adelgazar" cuando se trata de encontrar ropa. Les enseña a los niños que su cuerpo es algo que debe minimizarse. Déjalos que se diviertan con su guardarropa.
- Cultiva la belleza interior.
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