La posición de recuperación se usa para personas que están inconscientes pero que respiran. La posición de recuperación es diferente para los bebés. Después de realizar primeros auxilios básicos, y si está seguro de que la persona no tiene una lesión en la columna vertebral ni en el cuello, ponga a alguien en la posición de recuperación. Puede salvar una vida implementando estas simples medidas.

Método uno de dos:
Poniendo a un adulto en la posición de recuperación

  1. 1 Verifique la respiración y la conciencia. Antes de decidir colocar a alguien en la posición de recuperación, es importante que se tome un momento para evaluar la situación. Verifique si la persona está inconsciente, pero respirando, y no tiene otras afecciones potencialmente mortales. Hable con la persona para evaluar si responde. Verifique la respiración colocando la mejilla cerca de la nariz y la boca de la persona para sentir su respiración.
    • Si la persona está respirando e inconsciente o semiconsciente, puede colocarlo en la posición de recuperación.[1]
  2. 2 Considere posibles lesiones espinales. Si sospecha que la persona tiene una lesión en la columna vertebral, no intentes moverla hasta que lleguen los paramédicos. Si está luchando por respirar y es necesario abrir las vías respiratorias, coloque las manos a ambos lados de la cara y levante suavemente la mandíbula hacia arriba. Tenga cuidado de no mover su cuello. Las lesiones espinales pueden estar presentes si la persona:
    • Ha sufrido una lesión en la cabeza, un fuerte golpe en la parte posterior de la cabeza, una caída desde una altura de entre cinco y diez pies, y está (o ha estado) inconsciente.
    • Se queja de dolor intenso en el cuello o la espalda.
    • No moverá su cuello.
    • Se siente débil, entumecido o paralizado.
    • Ha torcido su cuello o espalda.
    • Ha perdido el control de sus extremidades, vejiga o intestinos.[2]
  3. 3 Posiciona los brazos y las piernas. Una vez que haya establecido que es seguro colocarlo en la posición de recuperación, hágalo a un lado para que pueda colocar los brazos. Coloque el brazo más cercano a usted en ángulo recto con respecto a su cuerpo, de modo que el codo esté hacia usted. La palma debe estar hacia arriba y frente a la cabeza.
    • Luego toma el otro brazo y colócalo sobre su pecho. Coloque la mano debajo del costado de la cabeza, de modo que la parte posterior de la mano quede contra la mejilla.[3]
    • Después de colocar los brazos, debe doblar la rodilla de la pierna más alejada de usted, de modo que el pie quede plano sobre el piso.[4]
  4. 4 Rueda hacia ti. Cuando haya posicionado los brazos y las piernas, puede girar suavemente sobre su costado. Sujete la rodilla levantada, y tire cuidadosamente hacia usted y hacia abajo. Asegúrese de que la mano que colocó debajo de la cabeza permanezca allí y apoye la cabeza. Sea lento y cuidadoso para asegurarse de no golpear la cabeza contra el suelo.
    • El brazo que extendiste en ángulo recto evitará que ruede más.[5] Rodar demasiado puede bloquear la expansión libre del cofre e impedir la respiración.
    • También puede girar a la persona agarrándola firmemente por la cadera, ya sea por un cinturón o la cintura de sus pantalones, o por un bolsillo delantero, y tirando, con una mano en el hombro más alejado de usted para la estabilización.
  5. 5 Abra la vía aérea. Una vez que ha hecho rodar a la persona, y se ha asegurado de que esté seguro y de que tenga la cabeza apoyada, puede abrir un poco las vías respiratorias. Para hacer esto, inclina suavemente la cabeza hacia atrás y levanta la barbilla. Verifique que la vía aérea esté libre de obstrucciones.
    • Continúe controlando su pulso y respiración mientras espera que llegue la ayuda.
    • Cúbralo con una manta o abrigo para mantenerlo caliente.

Método dos de dos:
Poniendo a un bebé en la posición de recuperación

  1. 1 Coloque al bebé boca abajo sobre su brazo. La posición de recuperación para un bebé, un bebé menor de un año, es diferente. Debe comenzar colocando cuidadosamente al bebé sobre su brazo, boca abajo y en un ligero ángulo. La cabeza del bebé debe estar ligeramente más baja que el cuerpo.[6]
    • Trate de mantener la elevación del cuerpo sobre la cabeza no más de cinco grados. Esto evita que el bebé aspire fluidos / bloqueos y fomenta el drenaje.
  2. 2 Apoye el cuello y la cabeza. Cuando coloque al bebé sobre su brazo, debe asegurarse de apoyar el cuello y la cabeza con la otra mano. Entonces, si está colocando al bebé sobre su brazo izquierdo, coloque su mano derecha debajo de su cabeza y cuello para sostenerlo.[7]
  3. 3 Mantenga la boca y la nariz despejadas. Cuando sostienes la cabeza del bebé, es esencial que no bloquees la boca y la nariz involuntariamente. Tenga en cuenta dónde están los dedos y verifique que el bebé pueda respirar.[8]
  4. 4 Espera por ayuda. Una vez que haya colocado al bebé en la posición de recuperación, controle su respiración y espere a que llegue la asistencia médica. Si el bebé deja de respirar en algún momento, es posible que deba realizar RCP.[9]