El ajo es un ingrediente antiguo utilizado para dar sabor a los alimentos. Para conservar el ajo fresco para cocinar, aquí hay una guía rápida.


Método uno de dos:
Mantenga ajo fresco

  1. 1 Obtenga solo el ajo que necesite. El ajo es un sabor muy fuerte, por lo que un poco vale mucho. Es fácil sobreestimar cuánto necesitará, así que tenga cuidado de no obtener demasiado.
  2. 2 Elija el mejor y más fresco ajo. Quieres una bombilla blanca con caparazón muy bonita, sin manchas negras. Asegúrate de que el ajo que obtienes tenga su propio caparazón distintivo.
  3. 3 Almacene su ajo correctamente. Esto es clave para mantener el ajo fresco. Guárdelo en un lugar oscuro, fresco y seco, tal vez en un recipiente o un vaso. Está bien dejarlo sentado en un mostrador, pero trate de mantenerlo alejado del calor, la humedad y demasiada luz solar.
  4. 4 Pele su ajo solo cuando vaya a usarlo. El ajo puede descomponerse muy rápido una vez que lo pela, así que asegúrese de hacerlo justo antes de usarlo.

Método dos de dos:
Preservación a largo plazo

  1. 1 Congela el ajo. Esta es la forma más fácil de conservar el ajo para su uso posterior. Simplemente pele los dientes de ajo, póngalos en una bolsa de plástico y péguelos en su congelador.
    • Picar el ajo antes de congelarlo para que sea más fácil tirarlo a un plato rápidamente.
    • La congelación de ajo picado en aceite evita que se congele, lo que le permitirá sacar cantidades apropiadas solo cuando esté listo para usar.
    • Usar aceite de oliva puede hacer que tu ajo dure más tiempo que cualquier otro aceite.
    • Pelar los dientes y puréalos. Puré con aceite en una licuadora o procesador de alimentos usando 2 partes de aceite por 1 parte de ajo. El ajo en puré se mantendrá lo suficientemente suave en el congelador para raspar las partes que se usarán en el salteado. Congele esta mezcla inmediatamente; no la guarde a temperatura ambiente.[1]
  2. 2 Seca tu ajo Use un deshidratador de alimentos u hornee a baja temperatura en los bastidores de secado de su horno.
  3. 3 Encurtir ajo. Esto altera ligeramente el sabor, pero aumenta drásticamente la vida útil.
  4. 4 Haga simples encurtidos refrigerador de su ajo. Esta es una forma más fácil de decapado de su ajo, y se mantendrá casi indefinidamente. Simplemente sumerja los dientes de ajo pelados en vinagre de vino blanco o rojo y agregue una cucharada de sal por cada taza de vinagre que use. Si lo desea, agregue hierbas secas como hojuelas de pimiento rojo u orégano para darle sabor. El ajo se mantendrá mientras permanezca sumergido en el vinagre.