El accidente cerebrovascular canino causado por la enfermedad vestibular ocurre con mayor frecuencia en perros mayores de siete años. Sin embargo, puede ocurrir en cualquier momento de la vida de su perro, y es importante conocer las señales de advertencia y tener un plan de acción. La clave es estar informado sobre los síntomas del accidente cerebrovascular, trabajar con su veterinario para controlar la salud de su perro con regularidad y proporcionar atención inmediata durante y después de un accidente cerebrovascular.[1]

Parte uno de tres:
Mantener a su perro a salvo durante un accidente cerebrovascular

  1. 1 Quédese con su perro hasta que termine el golpe. Esto puede tomar de unos minutos a varias horas, pero es importante estar con el perro para mantenerlos seguros y tranquilos. Con frecuencia, las personas no están presentes cuando se produce el accidente cerebrovascular, pero si observa un movimiento ocular rápido, pérdida de equilibrio o vómitos, es posible que su perro tenga un derrame cerebral. Trate de mantenerse cerca de su perro, y no los mueva hasta que los síntomas hayan cesado.[2]
  2. 2 Ayuda a tu perro a relajarse. Habla con el perro en voz baja y haz lo que puedas para que tu perro se sienta más a gusto. Aunque la situación puede ser aterradora o estresante para usted, trate de no demostrarle ese estrés a su perro. Permanece tan tranquilo como sea posible. Deje que su perro se mueva si lo desea sin detenerlo, pero si vienen a usted llorando o buscando atención, tómese el tiempo para hablar con ellos suavemente y acariciarlos.[3]
  3. 3 Ofrezca el agua del perro periódicamente. Algunos perros desarrollan una sed insaciable luego de un derrame cerebral agudo. Es importante que tengan agua, pero es posible que deba limitar la cantidad. Es posible que su perro no deje de beber mientras el agua esté delante de ellos, así que déjelos beber algunas golondrinas a la vez y elimine el agua. Controle el comportamiento de su perro y reaccione en consecuencia.
    • El veterinario podrá controlar cuidadosamente la hidratación de su perro y proporcionarle niveles adecuados y seguros de líquidos. Si no está seguro de cuánta agua ofrecer, llame a su veterinario o al hospital local de emergencia para animales.[4]
  4. 4 Eleve la cabeza de su perro. Mantenga la cabeza de su perro libre de exceso de presión. Asegúrate de que tu mascota esté elevada para que la sangre fluya lejos del cerebro si están acostados. Si el perro está sentado o caminando, trate de mover suavemente la cabeza hacia arriba para aliviar la presión. El accidente cerebrovascular es causado por un exceso de presión entre el cerebro y el hueso del cráneo, por lo que es esencial evitar la presión adicional.[5]
  5. 5 Lleve al perro al veterinario inmediatamente. Si hay una clínica de animales de emergencia cerca, vaya allí de inmediato. Cuanto antes un médico de mascotas pueda evaluar y ayudar a su perro, mejor. Pueden ayudarlo a mantener a su perro a salvo, y la atención profesional aumentará las posibilidades de que su mascota tenga una recuperación completa y saludable. Sin embargo, si crees que tu perro está teniendo un derrame cerebral, espera a mover al perro hasta que estén en calma.
    • En la mayoría de los casos, su perro tendrá que permanecer hospitalizado durante varios días, por lo que su veterinario puede controlar su salud a intervalos regulares.[6]

Parte dos de tres:
Cuidando a los perros que han sufrido un accidente cerebrovascular canino

  1. 1 Proporcione un lugar de descanso cómodo. Asegúrate de que tu cachorro tenga un lugar cálido donde se sienta seguro durante la recuperación. Los perros que se recuperan de un accidente cerebrovascular pueden estar confundidos o estresados. Si ya tienen un lugar regular, agregue algo de relleno extra, mantas o cojines en el área para que estén más cómodos. Es especialmente importante mantenerlos calientes sin sobrecalentamiento. Su veterinario será un recurso excelente para ayudarlo a proporcionar la comodidad óptima para su cachorro, una vez que regrese a su hogar.[7]
  2. 2 Reposiciona a tu perro regularmente. Si no pueden moverse libremente, su cachorro puede desarrollar llagas o dolores en el cuerpo cuando descansan demasiado tiempo en el mismo lugar. Suavemente cámbielos a otro lado o sobre su estómago periódicamente para evitar esto. Si su perro no puede moverse lo suficientemente bien como para salir a la basura para deshacerse de los desechos, puede colocarlos en heno, astillas de madera u otros materiales desechables y absorbentes.[8]
  3. 3 Administrar medicamentos según las instrucciones. Dependiendo de la causa o las preocupaciones médicas resultantes del accidente cerebrovascular de su perro, es posible que deba proporcionarles una variedad de medicamentos recetados. Se pueden recetar sedantes para perros ansiosos o desorientados, especialmente aquellos que demuestran comportamientos agresivos. Se pueden recetar medicamentos contra las náuseas si su cachorro está mareado y no puede retener los alimentos. Los antiinflamatorios se recetan para perros que todavía tienen problemas de hinchazón, y los anticonvulsivos se pueden usar para prevenir las convulsiones.[9]
  4. 4 Lleve a su perro al veterinario regularmente. Las visitas preventivas más frecuentes al médico son importantes para los perros que han sufrido un accidente cerebrovascular. Ir al veterinario al menos dos veces al año le da a su veterinario la oportunidad de detectar los primeros indicadores de accidente cerebrovascular, así como muchas otras enfermedades caninas que tal vez no reconozca. Su veterinario puede guiarlo a través de proporcionar la mejor atención para su perro en el hogar.[10]
  5. 5 Determine la causa del golpe. Es importante saber qué tipo de accidente cerebrovascular ha experimentado su perro. Los derrames cerebrales pueden ser causados ​​por un coágulo de sangre o sangrado en el cerebro. Esto puede ocurrir con poca o ninguna advertencia o como resultado de una salud deficiente prolongada causada por presión arterial alta, infección, cáncer, enfermedad renal o problemas de salud cardíaca. Es importante trabajar con el veterinario para comprender la causa raíz del accidente cerebrovascular a fin de desarrollar un plan de tratamiento para prevenir la recurrencia.
    • Por ejemplo, un perro cuyo accidente cerebrovascular es el resultado de la presión arterial alta puede necesitar tomar medicamentos regularmente para reducir la presión arterial.[11]
  6. 6 Diferenciar entre golpe de calor y enfermedad vestibular. El golpe de calor se produce cuando la temperatura corporal de su perro se eleva por encima de 103 ° F o 39 ° C durante un período prolongado. Esto puede provocar daños o fallas en el cerebro y otros órganos.Los síntomas son muy similares a los accidentes cerebrovasculares causados ​​por la enfermedad vestibular, pero las causas son muy diferentes y más fáciles de prevenir al asegurarse de ayudar al perro a mantenerse fresco y de proporcionar abundante agua en los días calurosos.
    • Los perros también pueden sufrir un golpe de calor causado por la temperatura prolongada como resultado de una enfermedad o infección. Asegúrese de llevar a su mascota al veterinario, si muestran signos de enfermedad o infección, como vómitos o letargo.
    • En raras ocasiones, los perros experimentan una malformación genética que los hace ser incapaces de regular la temperatura corporal. Esto es mucho más difícil de tratar y requerirá un mantenimiento continuo realizado por su veterinario.[12]
  7. 7 Aumenta la ingesta de antioxidantes de tu perro. Verifique la comida de su mascota para la inclusión de antioxidantes naturales comunes como las vitaminas C y E y el ácido cítrico. También puede encontrar antioxidantes sintéticos como BHA y BHT en la lista de ingredientes. Los antioxidantes son esenciales para prevenir los efectos negativos de la oxidación, que causa la degeneración de células sanas en el cerebro y otros órganos. Por lo tanto, aumenta el riesgo de apoplejía y otros problemas de salud.
    • Los perros a menudo comen hierbas como el romero en la naturaleza que aumentan su ingesta de antioxidantes, así que considere incluir un poco de romero fresco en las comidas diarias de su perro.[13]
  8. 8 Alimente a su cachorro con una dieta alta en ácidos grasos omega. Se cree que los Omega 3 ayudan a los perros a recuperarse de una apoplejía porque los ácidos grasos Omega 3 se concentran en el cerebro, donde crean conexiones entre las diversas partes del cerebro. También reducen la inflamación y aumentan el flujo de oxígeno a través del cuerpo, que es esencial para la función saludable de cada parte del cuerpo.
    • Puede buscar alimentos comprados en la tienda que incluyen Omega 3 o puede darle a su perro suplementos de Omega 3. Consulte con su veterinario antes de comenzar este curso de tratamiento.[14]

Parte tres de tres:
Cómo determinar si su perro tuvo un derrame cerebral

  1. 1 Mira los movimientos de tu perro. Es posible que no esté presente cuando su perro tiene un derrame cerebral, por lo que es importante conocer las señales de advertencia de que uno ha ocurrido. Su cachorro puede desequilibrarse, inclinarse hacia un lado o ser completamente incapaz de caminar. Otras mascotas comienzan a caminar en círculos porque están desorientadas. Si nota alguno de estos signos reveladores, vaya al hospital de mascotas de emergencia más cercano o a la oficina de su veterinario si es posible.[15]
  2. 2 Mira los ojos de tu perro. Si sus ojos se mueven rápidamente de un lado a otro, es posible que sufran un derrame cerebral o que hayan tenido uno previamente. Esto se llama nistagmo y también puede hacer que su perro no pueda enfocar sus ojos. El nistagmo puede no ocurrir constantemente, pero después de un derrame cerebral o durante un derrame cerebral, es probable que vea algún indicador de que los ojos de su perro están desenfocados, se mueven rápidamente o están colocados de forma irregular (con los ojos cruzados).[16]
  3. 3 Cuente las respiraciones de su perro. La respiración rápida es otro indicador temprano de que su perro está sufriendo un derrame cerebral, puede tener un derrame cerebral o ya ha tenido un derrame cerebral. Muchos perros jadean como si estuvieran demasiado calientes, pero en otros, simplemente verán que sus lados suben y bajan muy rápido. Puede parecer que otros perros tienen problemas para respirar y se ven y actúan como si necesitaran aire.[17]
    • Por lo general, los perros respiran entre diez y treinta y cinco veces por minuto. Para verificar la tasa de respiración de su perro, configure un temporizador durante quince segundos. Cuente los latidos del corazón de su perro y multiplique por cuatro. Si el latido del corazón en reposo de su perro es mayor de treinta y cinco años, busque asistencia médica.[18]
  4. 4 Controle la ingesta de alimentos de su perro. El ataque cerebral afecta a algunos perros de la misma manera que lo hace el mareo. Causa mareos y náuseas que pueden provocar vómitos y pérdida de apetito. Si su perro parece repentinamente indispuesto o incapaz de comer o vomita con frecuencia después de las comidas, esto puede ser una señal de advertencia de apoplejía.[19]
  5. 5 Compruebe si hay párpados y encías rojos brillantes. Esta decoloración indica que su cachorro ha tenido una disminución en la cantidad de circulación de oxígeno. La coloración rojo oscuro dentro de los párpados y la boca es uno de los cambios más notables que ocurre cuando los perros han sufrido un derrame cerebral recientemente.[20]