La displasia de cadera es una condición degenerativa común en perros que ocurre cuando la articulación de la cadera de su perro no se forma correctamente. Una combinación de factores genéticos y otros puede causar que los tejidos blandos que rodean la articulación se desarrollen anormalmente. Esta condición puede afectar a cualquier perro, macho o hembra, pequeño, mediano o grande. Sin embargo, más del 50 por ciento de algunas razas grandes, como Bernese Mountain Dogs, Boxers, Chesapeake Bay Retrievers, German Shepherds y Old English Sheep Dogs, generalmente se ven afectadas y esta condición suele ser menos común en perros pequeños.[1] Los ajustes en el peso, el cuidado y la rutina de ejercicios de su perro pueden ayudar a prevenir que la displasia de cadera se convierta en un problema para su cachorro.

Parte uno de tres:
Alimentando a tu perro con una dieta saludable

  1. 1 Dele a su perro alimentos de alta calidad llenos de nutrientes y minerales. La mayoría de los veterinarios argumentan que el peso extra en el marco de su perro puede generar estrés y presión en sus articulaciones, especialmente en las articulaciones de la cadera. Una dieta deficiente, sin nutrición, también puede conducir a un crecimiento óseo deficiente y otras anomalías de articulaciones y cartílagos en cachorros y perros adultos. Controle el peso de su perro para prevenir la obesidad y evite poner tensión innecesaria en sus articulaciones.[2][3]
    • Busque alimentos comerciales para perros de alta calidad que se conservan con vitamina E u otro conservante natural. Estos productos no tienen productos químicos y contienen carne de alta calidad en lugar de subproductos cárnicos. Es posible que tenga que pagar más por comida para perros de mayor calidad que esté llena de buenas fuentes de proteínas, carbohidratos y grasas. Pero valdrá la pena si mantiene a su perro saludable y se asegura de que no termine con sobrepeso.[4]
    • También debe ver el estado físico actual de su perro. ¿Se ve hinchado o demasiado redondo en su zona media? La investigación ha demostrado que los perros que se mantienen muy delgados durante sus primeros años de cachorro pueden tener un riesgo reducido de desarrollar problemas de cadera. Mantener a tu perro delgado y activo puede ayudar a prevenir cualquier problema asociado con la obesidad.
  2. 2 Considere darle a su perro suplementos dietéticos. Debes asegurarte de que tu perro esté obteniendo suficientes vitaminas y minerales dándole vitaminas antioxidantes C y E. También puedes darle suplementos de Perna. Estos suplementos contienen 57 nutrientes y son buenos para fortalecer las articulaciones de su perro.
    • Hable con su veterinario sobre los suplementos correctos para su perro y la dosis adecuada para cada suplemento antes de darle cualquier suplemento a su perro. A menudo, los suplementos se trituran en la comida de su perro para que sean fáciles de consumir.
  3. 3 Habla con tu veterinario si crees que tu perro puede tener sobrepeso. Su veterinario puede ayudarlo a desarrollar una dieta para su perro que pueda ayudar a reducir su peso o ayudarlo a mantener el peso. Muchas razas grandes son susceptibles de comer en exceso, por lo que su veterinario puede ofrecer consejos sobre cómo controlar mejor la dieta de su perro.
    • Su perro también puede tener ciertas alergias u otras afecciones que pueden estar causando la obesidad. Pídale a su veterinario que verifique otros problemas de salud que puedan estar afectando el peso de su perro.

Parte dos de tres:
Creando una Rutina de Ejercicio

  1. 1 No permita que su perro corra o salte cuando sea un cachorro. El exceso de ejercicio de su perro cuando es joven puede provocar problemas en los huesos y articulaciones que pueden conducir al desarrollo de displasia de cadera. Los ejercicios suaves y de bajo impacto pueden ser beneficiosos para los cachorros, pero evite dejar que su cachorro corra, salte o salte hasta que esté físicamente maduro.[5]
    • Los deportes de alto impacto como saltar y saltar pueden ser difíciles para las articulaciones en desarrollo de su cachorro, así que evite hacer estas actividades con su cachorro hasta que esté completamente desarrollado.
  2. 2 Lleve a su perro a caminar o corra cuando sea adulto. Mantenga a su perro activo para ayudarlo a mantenerse en forma con ejercicios moderados como correr, caminar y nadar. Los perros con masa muscular grande y fuerte en la pierna pueden tener menos probabilidades de desarrollar displasia de cadera que los perros con una masa muscular más pequeña.[6]
  3. 3 Evite hacer muchas actividades de salto con su perro. Las actividades que podrían aplicar demasiada fuerza en las articulaciones de su perro, como saltar para un Frisbee o saltar por una pelota, pueden conducir al desarrollo de problemas de cadera. El caminar, correr y nadar consistentemente puede ayudar a su perro a desarrollar fuerza muscular sin poner demasiado estrés en su cuerpo.[7]

Parte tres de tres:
Detección de su perro para la displasia de cadera

  1. 1 Trae a tu perro al veterinario para que lo pruebe. Es posible que su perro no muestre signos de displasia de cadera hasta que tenga entre cuatro meses y un año de edad. Existe un espectro de síntomas, desde ningún síntoma hasta temblores, tisaje o marcha inestable. Tu perro también puede saltar cuando él corre, o puede ser reacio al ejercicio o la actividad extenuante.
    • Si sospecha que su perro podría tener displasia de cadera, es mejor llevarlo a su veterinario para que lo pruebe. Mientras más pronto reciba el diagnóstico, más pronto podrá tratar la condición de su perro y ayudar a controlar cualquier dolor o malestar que pueda experimentar.
  2. 2 Permita que su veterinario haga un examen físico y tome radiografías de su perro. Su veterinario examinará y tocará las caderas de su perro para detectar cualquier sensación de flojedad en las articulaciones o cualquier reacción de dolor de su perro cuando flexiona o extiende las articulaciones de la cadera.
    • Los rayos X ayudarán a su veterinario a confirmar que su perro tiene displasia de cadera y determinar cuán grave es su condición.
  3. 3 Discuta las opciones de tratamiento con su veterinario. Existen varios procedimientos quirúrgicos diferentes disponibles para corregir la displasia de cadera de su perro. Sin embargo, la cirugía recomendada para su perro dependerá de su edad, peso y tamaño. Su veterinario puede recomendar dos opciones quirúrgicas diferentes:
    • Osteotomía pélvica triple, que se usa en cachorros jóvenes.
    • El reemplazo total de cadera se recomienda para perros con artritis degenerativa o displasia crónica de cadera.