La telepatía es la capacidad de transmitir palabras, emociones o imágenes a la mente de otra persona. Si bien no hay evidencia de que exista telepatía, aún puedes intentarlo. Relaje su cuerpo y mente, visualice que el receptor está justo frente a usted y concéntrese en enviarles una palabra o imagen simple. Tomen turnos para enviar y recibir mensajes con un amigo cercano o pariente, y rastrear su progreso con un diario. Con la práctica, es posible que se sorprenda al descubrir que usted y su amigo tienen una fuerte conexión mental.

Parte uno de tres:
Enfocando tus pensamientos

  1. 1 Cree que la telepatía es posible. El remitente, o la persona que envía el mensaje telepático, y el receptor deben creer que la telepatía es posible. Dígase a sí mismo: "Soy capaz de aprender telepatía, y quiero que suceda".[1]
    • Asegúrate de practicar con alguien que esté abierto a la posibilidad de la telepatía. Un socio escéptico no estará abierto a comunicarse telepáticamente.
    • No hay evidencia científica de que exista telepatía. Sin embargo, si quieres tratar de aprender cómo enviar mensajes telepáticos, ¡definitivamente ayuda estar abierto a la posibilidad!
  2. 2 Sintoniza tus sentidos físicos. Intenta reproducir el ruido blanco a través de auriculares y usando gafas de protección contra apagones. Desviar la atención de tus percepciones físicas podría permitirte enfocarte más profundamente en enviar el mensaje telepático.[2]
    • Tú y el receptor deberían intentar desconectar tus sentidos. La privación sensorial puede ayudarlos a concentrarse en el mensaje.
  3. 3 Estira tus músculos o intenta hacer yoga. Intentar enviar un mensaje telepático requiere mucho enfoque mental, así que trata de relajarte física y mentalmente. El estiramiento regular y la práctica de yoga pueden ayudarlo a aprender cómo ponerse en un estado concentrado y relajado.[3]
    • Cuando se prepare para enviar un mensaje telepático, intente estirar las piernas, los brazos y la espalda. Inhale mientras se mueve hacia una pose, luego exhale lentamente mientras estira durante 15 o 20 segundos. A medida que te esfuerzas, visualiza toda tu tensión dejando tu cuerpo.
  4. 4 Medita para calmar tu mente. Use ropa holgada y siéntese erguido en una posición cómoda. Inhala y exhala lentamente, y haz tu mejor esfuerzo para despejar tu mente de pensamientos no deseados. Imagine pensamientos dispersos y aleatorios que abandonan su mente al exhalar.[4]
    • Haz tu mejor esfuerzo para enfocar tu mente en un solo pensamiento. Intente meditar durante al menos 20 minutos al día. Con la práctica, debería ser más fácil enfocar tu mente.
    • Una vez que estás en un estado tranquilo y concentrado, estás listo para intentar enviar un mensaje telepático. Tenga en cuenta que tanto el emisor como el receptor del mensaje telepático deberían relajarse y aclarar sus mentes.

Parte dos de tres:
Enviando un mensaje telepático

  1. 1 Visualice a la persona que recibe su mensaje. Cierre los ojos e imagine el receptor lo más claramente posible. Trate de imaginar que están sentados o de pie justo en frente de usted. Vea los detalles con el ojo de su mente, como el color de ojos, el peso, la altura, la longitud del cabello de la persona y la forma en que se sientan o se paran.[5]
    • Si está lejos del receptor, podría ser útil mirar una imagen de ellos antes de comenzar a visualizarlos.
    • A medida que construyes tu imagen mental y la envías al receptor, deben relajarse y enfocarse en estar abiertos al mensaje. Pídales que aclaren sus ideas e imaginen que se encuentra frente a ellos con la mayor cantidad de detalles posible.
  2. 2 Imagina cómo se siente comunicarse con la persona. Recuerda los sentimientos que experimentas cuando interactúas con la persona cara a cara. Siente estas emociones como si la persona realmente estuviera en tu presencia. Concéntrese en estos sentimientos y crea que está creando una conexión con la otra persona.[6]
  3. 3 Céntrate en una imagen o palabra simple. Cuando recién comiences, mantente con algo simple, como un objeto cercano. Visualícelo con la mayor cantidad de detalles posible y centre su mente únicamente en él. Concéntrese en lo que parece, cómo es tocarlo y cómo lo hace sentir.[7]
    • Por ejemplo, imagina una manzana. Vea una manzana en particular lo más claramente posible en su mente. Imagina su sabor y la sensación de morderlo. Enfoca tus pensamientos únicamente en la manzana.
  4. 4 Transmite tu mensaje Después de formar una imagen mental clara, imagina el objeto que viaja desde tu mente hacia el receptor. Visualícese cara a cara con el receptor y dígales "Apple", o lo que sea que piense que está transmitiendo. En el ojo de su mente, vea la expresión de su rostro al comprender lo que les está diciendo.[8]
    • Tenga en cuenta que hay una diferencia entre estar concentrado y esforzarse. Concéntrese en la imagen mental, pero manténgase relajado.
    • Una vez que hayas enviado el pensamiento, libéralo de tu mente y no lo pienses más. Imagina que lo has regalado al receptor y ya no te estás sosteniendo.
  5. 5 Pídale al receptor que anote lo que viene a su mente. Una vez que haya enviado el mensaje, el receptor debe permanecer relajado y abierto hasta que sientan que un pensamiento ha entrado en su mente. Luego deben escribir todo lo que les viene a la mente.[9]
    • Antes de registrarse con el receptor, también debe anotar la idea que estaba tratando de enviar. Esto puede ayudarte a ser objetivo cuando comparas tus resultados.
  6. 6 Compare los resultados entre sí. Cuando ambos estén listos, usted y el receptor deben mostrarse mutuamente lo que ha escrito. No te desanimes si no tienes éxito, especialmente al principio. Tómese su tiempo para aclarar su mente, y luego intente de nuevo con una imagen diferente.[10]
    • No te desanimes si no puedes enviar un mensaje telepático claro. ¡Solo intenta divertirte mientras lo intentas!

Parte tres de tres:
Practicando con tu compañero

  1. 1 Tomen turnos tratando de enviar y recibir mensajes. Cambie sus roles mientras practica y vea si tiene más éxito con uno u otro. Quizás descubras que eres mejor para recibir mensajes, y tu amigo es mejor para enviarlos.[11]
    • Tenga en cuenta que es útil practicar con alguien en quien confíe, como un amigo cercano o pariente.
  2. 2 Intenta jugar un juego de cartas. Tome cinco cartas únicas, como naipes o cartas con símbolos. Con su pareja en un lugar diferente, elija una tarjeta al azar. Relájese y calme su mente, luego enfoque sus pensamientos únicamente enviando la imagen de la tarjeta a su amigo.[12]
    • Haga que su pareja calme su mente y trate de sentir su mensaje. Cuando sientan que se les viene a la mente una imagen, pídales que escriban la tarjeta que les envió, luego verifique sus resultados.
  3. 3 Dibuje una imagen, luego envíela a su compañero. Intente dibujar una forma o una combinación simple de formas, como un círculo dentro de un triángulo. Enfoca tus pensamientos en la forma y visualiza la imagen que viaja de tu mente a la de tu compañero. Cuando sientan que han recibido el mensaje, pídales que dibujen cualquier forma que les haya surgido.[13]
    • Alternativamente, alguien más podría dibujar una imagen y mostrarla al remitente, que luego intentaría transmitirla al receptor.
  4. 4 Mantenga un diario de telepatía para seguir su progreso. Cada vez que tratas de comunicarte telepáticamente, escribe los detalles de tu intento. Tenga en cuenta quién era el emisor y el receptor, cuál fue la imagen transmitida y si tuvo éxito o no. Un diario puede ayudarte a encontrar maneras de refinar tus habilidades.[14]
    • Incluso si un intento no tuvo éxito, tenga en cuenta cualquier detalle prometedor. Por ejemplo, si el mensaje fue "manzana" y tu amigo escribió "rojo" o "fruta", ¡eso es una gran señal!