Los gatos y los perros se encuentran cada vez más con el sapo de caña (Bufo marinus) desafío en Australia y Hawai. Los sapos de caña llevan glándulas de veneno en la espalda que liberan líquido corrosivo y tóxico cuando están en peligro de extinción. Este líquido generalmente entra en los ojos y la boca de mascotas curiosas, lo que provoca dolor inmediato, aumento de la salivación, tropezones, vómitos y, a veces, convulsiones e incluso coma. Si vives en un área infestada de sapo de caña, mantén segura a tu mascota con algunos pasos simples.

Pasos

  1. 1 Alimente a sus mascotas en el interior. Los sapos de caña se sienten atraídos por la fuente de alimento. El alimento para gatos y perros es especialmente atractivo para ellos. Mantenga un área dentro de la casa para alimentar. Si los sapos de caña comen comida para mascotas, solo comerla no la envenena, pero la mascota que trata de defenderla corre el riesgo de ser rociada por el sapo de caña.
  2. 2 Deje el agua potable para mascotas adentro. De nuevo, no dejes un baño como una invitación.
  3. 3 Mantenga a sus mascotas adentro cuando los sapos de caña estén más activos. Los sapos de caña tienden a ser más activos por la noche y después de la lluvia.
  4. 4 Eliminar los lugares de ocultamiento. Las plantas espesas pueden convertirse en espacios de escondite para los sapos de caña. Algunas características de jardinería también pueden proporcionarles refugio. Elimine estos atrayentes o revíselos regularmente y elimine cualquier sapo de caña que se encuentre en ellos.
  5. 5 Supervise el tiempo al aire libre de su perro cuando los sapos de caña están alrededor. Dejar a un perro solo con sapos de caña a menudo es un problema. En particular, tenga mucho cuidado con los cachorros y los perros juguetones.
  6. 6 Construye una barrera Es posible mantener a los sapos de caña fuera de su patio trasero, pero es costoso y requiere un poco de esfuerzo. Una barrera de malla fina alta de 50 centímetros (19,7 pulgadas) que se extienda por lo menos 15 centímetros (5,9 pulgadas) bajo tierra sería un buen comienzo. Tendrá que cubrir por completo el perímetro del área que desea vallar, incluidas las entradas de la puerta. Retire cualquier sapo de caña en el patio. NO MATAR AL PUNTO. Recógelo con la protección adecuada evitando el contacto directo con la piel.