Vivir una buena vida depende de lo que te importa. Tómese el tiempo para definir sus valores, prioridades y metas para la vida. Trabaja para cumplir los deseos que deseas alcanzar. Construya sus relaciones y sea un buen miembro de la familia y amigo. Sirva a su comunidad y a la humanidad y sea fiel a usted mismo.

Parte uno de cuatro:
Enfatizando sus deseos de vida

  1. 1 Haga una lista de lo que las personas o cosas le importan. Cuando busca un plan de vida, tiene sentido priorizar algunas áreas de su vida. Haga una lista de todas las cosas que valora en su vida. Puede incluir a su familia, amigos, un determinado pasatiempo, naturaleza o carrera. Tómese el tiempo para pensar profundamente acerca de las cosas sin las cuales no podría imaginar vivir.
    • Por ejemplo, si bien te gustaría jugar baloncesto, ¿es esta una de las cosas más importantes de tu vida? Quizas lo es. Si no, es probable que sea un hobby.
  2. 2 Determine sus valores centrales. Tienes tu propia brújula moral, que te guía a través de la vida. ¿Cuáles son los valores que quieres que refleje tu vida? ¿Te esfuerzas por ser honesto? Quizás quieras ser cariñoso y considerado con los demás. Quizás tengas un fuerte sentido de justicia social. Definir tus valores te ayudará a determinar tus acciones futuras.
    • Por ejemplo, si premia la honestidad, hay algunas carreras que quizás no sean las mejores para usted. Los agentes de la CIA, por ejemplo, no pueden revelar a otros lo que realmente hacen.
    • Por otro lado, si te preocupa apasionadamente la justicia social, quizás podrías considerar estudiar trabajo social.
    • Para consejos adicionales, vea Live Life to the Fullest.
  3. 3 Encuentra tu vocación Cada persona tiene sus propios talentos y fortalezas. Intenta vivir tu vida como reflejo de tu vocación única. Encontrar su llamada no significa seguir el camino de otra persona.[1] En su lugar, busca definir lo que haces bien y cómo puedes vivir una vida que incorpore tu fortaleza y tal vez ayude a otras personas también.
    • Por ejemplo, puede ser un maestro talentoso y músico. Tal vez su vocación es enseñar lecciones de piano a niños.
    • Por otro lado, puede ser un gran oyente y se preocupa por ayudar a los demás. Puede ser adecuado para ser un psicólogo.
    • Si los huesos de los dinosaurios te excitan sin fin, tal vez tu vocación es la paleontología y la difusión del conocimiento sobre los dinosaurios y el cambio ambiental a una nueva generación.
  4. 4 Nombra tus metas. Al hacer objetivos para la vida, podemos vivir con un propósito. Sepan que en un momento dado, sus objetivos pueden cambiar. Puede adaptar sus objetivos a medida que avanza en la vida. Sin embargo, si tienes alguna estructura, es probable que tu vida sea un poco más fácil.
    • Por ejemplo, es posible que desee convertirse en un médico. Sus mini metas podrían ser asistir a la universidad, ingresar a la escuela de medicina, graduarse y comenzar a practicar medicina. Cada uno de estos objetivos tendrá subobjetivos.
    • Si tu objetivo, por otro lado, es tener hijos, primero debes pensar cómo quieres tenerlos. ¿Quieres un compañero con quien puedas criarlos? ¿Prefieres adoptar? ¿Cuáles son las diferentes estrategias que puede seguir para cumplir este objetivo?
  5. 5 Priorizar Una vez que haya determinado las personas que le importan, sus valores y sus objetivos, cree prioridades. En diferentes momentos de la vida, puede priorizar diferentes aspectos. Por ejemplo, mientras estás en la escuela, tus estudios pueden tener prioridad. Más tarde, su relación o hijos podrían enfocarse más. Al mantener sus prioridades en mente, puede planificar mejor su vida.
    • Consulte Priorizar para obtener consejos adicionales.

Parte dos de cuatro:
Vivir en la compañía de otros

  1. 1 Construya relaciones sólidas con los cercanos. Tómese el tiempo para construir relaciones sólidas con las personas que le importan. Escuche sus problemas. Ayúdalos cuando sea necesario. Cuando los ofendas, discúlpate y esfuérzate por hacerlo mejor. Practique gestos amables como dar paseos a la gente o tarjetas de cumpleaños. Vea Tener una relación saludable para obtener más consejos. Además, practica estos comportamientos:
    • Construye un círculo de confianza. Asegúrese de que los miembros de su familia y amigos sepan que pueden compartir sus pensamientos abiertamente con usted. No le cuentes los secretos de otras personas. Si alguien te pide que mantengas confianza, hazlo.
    • Se compasivo con los demás. Incluso si alguien te hace mal, si son sinceros en su arrepentimiento, muéstrales perdón. No menciones sus transgresiones pasadas en momentos de ira.
  2. 2 Promueva una comunicación saludable. Sé directo cuando hables con otros. Escucha atenta y atentamente. Si tiene desacuerdos, intente luchar eficazmente. Es decir, no se llamen unos a otros nombres. En cambio, discuta sus problemas con calma. Asegúrate de escuchar el punto de vista de la otra persona.
    • Por ejemplo, podría ser prudente durante los argumentos repetir el punto de vista de la otra persona. Esto te muestra que entiendes. Podrías decir: "Lo que te oigo decir es que te molesta el hecho de que estoy siempre en casa tan tarde".
    • Preguntar en lugar de suponer. Si sientes que una relación está sufriendo de alguna manera, habla con la otra persona abierta y sinceramente.[2]
  3. 3 Se un buen vecino Parte de vivir una buena vida proviene de construir una red local muy unida. Si tiene vecinos, sea útil con ellos. Mira a su gato cuando se van de vacaciones. Ofrezca palear el camino de entrada de un vecino anciano. Practique la vecindad y quizás encuentre que es contagioso.
  4. 4 Sirve a tu comunidad Una forma de vivir una buena vida es contribuir a la comunidad en la que vives. Puede ser voluntario en un comedor de beneficencia o manejar una unidad de ropa para los refugiados. Pida consejos a los representantes de su gobierno local u organizaciones religiosas sobre qué causas podrían ayudar. También podría planear una recaudación de fondos para una causa en la comunidad global.

Parte tres de cuatro:
Disfrutando de la vida

  1. 1 Viajar. Mira lo que hay que ver en el mundo que te rodea.Explore nuevas áreas en su vecindario o pueblo o, si su presupuesto lo permite, viaje más lejos. No hay manera de que podamos visitar cada lugar en nuestra vida. Sin embargo, podemos crear conciencia y desarrollar empatía al viajar a otros lugares.
  2. 2 Practica pasatiempos. ¡Además de su vocación y propósito de vida, también necesita divertirse! Encuentre pasatiempos que le interesen e incorpórelos a su rutina. Por ejemplo, puedes unirte a un grupo de tejer o comenzar a escalar rocas. Al hacer hobbies, también conocerás a más personas y tendrás una vida más plena.
    • Ver Encuentra un pasatiempo.
  3. 3 Trate de comer alimentos saludables. Coma frutas y verduras frescas y busque pastas y panes integrales. Incorpore más aves de corral y pescado en su dieta (a menos que sea vegetariano). Los frijoles, las nueces y los huevos también te ofrecen una buena nutrición. No exagere su ingesta de sodio, carbohidratos o grasas saturadas.[3]
    • Bebe 9 tazas de líquidos por día si eres mujer y 13 tazas al día si eres hombre.[4]
  4. 4 Hacer ejercicio moderadamente Intente incorporar 2.5 horas de ejercicio cardiovascular moderado o 1.25 horas por semana. Para fortalecer sus músculos, levante dos veces por semana. Al hacer ejercicio regularmente, es probable que lleve una vida más larga y más saludable. Tu corazón, músculos y huesos se beneficiarán.[5]
    • El ejercicio moderado podría ser caminar, practicar yoga, bailar o nadar.
    • El ejercicio extenuante podría estar funcionando o haciendo una clase de giro.
  5. 5 Aprovecha tu espiritualidad. Si sigues o no una religión en particular, encuentra lo que te da sentido en tu vida. ¿Por qué estás en la tierra? ¿Qué nutre tu alma? Particularmente cuando enfrenta momentos difíciles en la vida, practicar la espiritualidad puede ayudarlo a enfrentarlo. Ser espiritual también te ayuda a perdonar a los demás.[6]
    • La oración y la meditación pueden ayudarlo a relajarse y a enfocarse nuevamente.[7]
    • Tener una comunidad construida en torno a la espiritualidad o la religión puede apoyarte cuando lo necesites.[8]

Parte cuatro de cuatro:
Estar agradecido de por vida

  1. 1 Contempla la gratitud. Todos los días, cuando te levantas, expresa tres cosas por las que estás agradecido. Tal vez tienes un trabajo que amas. Tal vez tienes un compañero de apoyo. Es posible que no tenga enfermedades. Siempre tomarse un momento para reflexionar sobre las cosas por las cuales está agradecido puede ser muy útil.
    • Vea Gratitud Express para obtener ideas sobre cómo expresar su gratitud a los demás.
    • Practique contando sus bendiciones antes de irse a dormir haciendo un recorrido de tres momentos positivos de su día. Contempla por qué ocurrieron estos momentos y qué acciones tuyas condujeron o no a ellos.[9]
  2. 2 Mantenga los problemas relativos. Parte de vivir una buena vida no es envolverse en los problemas diarios que todos enfrentamos. Si bien es importante manejar los problemas, tómese un momento para pensar qué está funcionando bien en su mundo. Quizás viste a alguien escoltar a una anciana al otro lado de la calle. Tal vez los niños en su escuela local están recolectando comida para las personas sin hogar. ¿Todavía tienes tu salud? ¿No estás sin dinero? ¿Todavía tienes seres queridos? Aunque es posible que le falten algunas de estas cosas, es útil mantener sus problemas en una posición relativa.
  3. 3 Sal afuera. Una forma de estar agradecido por la vida y disfrutar de la vida es relacionarse con la naturaleza. Pasee en bicicleta por el río o dé un paseo por el bosque. Escuche atentamente los ruidos de los diferentes animales e insectos. Huela las plantas o la lluvia fresca. El mundo está lleno de atributos increíbles. Tómese un momento para dejar que se hunda.
    • Considere tomar una caminata reflexiva y multisensorial en la que no se centre en ninguna tecnología. Más bien, mire a su alrededor, observe diferentes edificios o árboles en su entorno. Concéntrese en los olores que provienen de una panadería o hierba recién cortada. Escucha las voces de las personas o el viento en los árboles.[10]
  4. 4 Abstenerse de actividades placenteras temporalmente. A veces, para apreciar las cosas buenas que tenemos en la vida, necesitamos detenernos un momento. La pausa puede ser de una semana o un mes. Cuando volvemos a nuestras actividades, es más probable que nos demos cuenta de lo afortunados que somos de tenerlas.[11]
    • Por ejemplo, tal vez tenga un café con leche de calabaza todos los días en octubre. Intenta tomar una semana libre. Podrá apreciar aún más la bebida y su impacto en su felicidad.