Grandes dientes pueden darte una sonrisa ganadora y ese impulso extra de confianza. Cuidar tus dientes también es muy importante para tu salud en general. Al agregar algunos pasos simples a su rutina diaria, puede tener una gran sonrisa y una boca sana. No es difícil lograr un buen juego de dientes si los cuida adecuadamente. Asegúrese de pedirle a su dentista pautas específicas para sus dientes y su estilo de vida.

Método uno de tres:
Practica buena higiene oral

  1. 1 Cepíllate los dientes. El cepillado es una de las mejores maneras de hacer que sus dientes se vean y se sientan grandiosos. Sin embargo, el acto de cepillar no es suficiente. Debe asegurarse de hacerlo correctamente y con frecuencia. Mucha gente piensa que más es mejor, pero en realidad solo debes cepillar dos veces al día. Aumentar la frecuencia puede desgastar el esmalte protector de los dientes y provocar sensibilidad y dolor.[1]
    • Pase por lo menos dos minutos cepillando (cada vez). Trata de dividir tu boca en cuatro secciones (dos arriba, dos abajo) y pasa 30 segundos en cada sección.
    • No te cepilles demasiado. Demasiada presión puede dañar el esmalte, que es la cobertura protectora de los dientes. En cambio, cepille con movimientos firmes, pero suaves.
    • Sostenga su pincel en un ángulo de 45 grados y cepille con movimientos cortos, haciendo un movimiento hacia arriba y hacia abajo en cada diente.
    • También debe cepillar la encía hacia su superficie de masticación para estimular el flujo sanguíneo y mantener su protección antibacteriana.
  2. 2 Seda floja. Usar hilo dental es fundamental para mantener una buena salud bucal, pero es un paso que muchas personas omiten. Asegúrese de usar hilo dental todos los días. Podrá ver una mejora en su sonrisa: sus dientes tendrán menos acumulación y su boca también se sentirá limpia. El uso de hilo dental también puede ayudar a prevenir la caries y la enfermedad de las encías.[2]
    • Use hilo dental al menos una vez al día para eliminar la placa de entre los dientes. Los dentistas se dividen sobre si es mejor usar hilo dental antes o después del cepillado. Pero todos están de acuerdo en que agregar hilo dental a su rutina diaria es esencial para tener unos dientes excelentes.
    • Use alrededor de 18 pulgadas de hilo dental. Envuelva los extremos alrededor de ambas manos para obtener un agarre firme. Luego, mueva la parte media del cordón hacia arriba y hacia abajo entre dos dientes. Haga una forma de "C" con el hilo dental. Esto te ayudará a obtener las partes curvas de tus dientes. Repite a través de toda tu boca.
    • No use hilo dental con demasiada fuerza. Ser agresivo cerca de tus encías puede ser doloroso y causar daño.
  3. 3 Usa los productos correctos. Hay una amplia variedad de cepillos de dientes, pastas, hilos y enjuagues disponibles en farmacias y supermercados. Es bueno tener una idea básica de lo que necesita cuando elige sus productos de cuidado dental. Por ejemplo, la mayoría de los adultos deben usar una pasta de dientes que contenga flúor. Se ha demostrado que previene las caries.[3]
    • Elija una pasta de dientes que le guste. Si prefieres un gel, está bien. Si te gusta el sabor de gaulteria, también está bien. Los dentistas informan que la mayoría de las marcas funcionan esencialmente de la misma manera. Escoger el que más te guste te animará a usarlo más a menudo. El mismo consejo es para el hilo dental y el enjuague bucal.
    • Considere usar un cepillo de dientes eléctrico (o con batería). La ventaja de estas herramientas es que básicamente solo necesitas guiar el pincel. Esto proporcionará un golpe más consistente.
    • Tenga en cuenta que algunos enjuagues bucales simplemente refrescan la respiración. Para asegurarse de que la que está comprando será efectiva, busque una que contenga flúor y tenga el sello de aprobación ADA.[4] La clorhexidina es la mejor sustancia antibacteriana que funciona para combatir las especies bacterianas agresivas.
  4. 4 Entra en una rutina. Una vez que conozca los principios básicos de una higiene oral adecuada, es una buena idea hacerlo una parte constante de su rutina diaria. Trate de adquirir el hábito de cepillarse los dientes a la misma hora todos los días. Esto lo hará sentir más natural y será menos probable que lo olvide.[5]
    • Intente comprar dos tubos de pasta dental a la vez (un blanqueador, un fluoruro) y siempre con una pasta de dientes de respaldo. De esta manera, siempre estará preparado para cuidar sus dientes, incluso si sucede lo inesperado.

Método dos de tres:
Visitando a su dentista

  1. 1 Elija el dentista adecuado. Muchas personas temen ir al dentista. Reconozcámoslo, realmente no es la actividad favorita de nadie. Sin embargo, si encuentra un dentista con el que se sienta cómodo, la experiencia definitivamente puede ser mucho mejor. Asegúrate de que te sientas a gusto en su oficina y de que te traten con respeto. Por supuesto, la parte más importante es elegir un dentista con credenciales y competente.[6]
    • Obtenga algunos comentarios sobre dentistas locales. Puede preguntar a amigos, familiares y compañeros de trabajo si tienen una oficina que recomiendan. También puede leer las revisiones de pacientes actuales y antiguos en línea.
    • Solicite una consulta antes de realizar cualquier procedimiento. Esto le permitirá conocer al dentista y asegurarse de que se sienta cómodo en el ambiente. En este momento, también puede asegurarse de que la oficina acepte su seguro dental.
    • Si no tiene seguro dental, querrá consultar precios. También debe sentirse libre de preguntar si el dentista ofrece planes de pago o una escala móvil.
  2. 2 Visita regularmente La mayoría de los expertos recomiendan ir al dentista cada seis meses para un chequeo y limpieza, que incluye pulido, aire abrasivo y un cepillado profesional que alivia la inflamación de las encías. En estas visitas, recibirá una limpieza a fondo y el dentista verificará si hay caries, signos de enfermedad de las encías y otros problemas. Los chequeos regulares son importantes porque el médico puede detectar problemas potenciales y recomendar un plan de tratamiento. Sus dientes también se verán bien después de una limpieza profesional.[7]
    • Programe sus citas con anticipación. Las oficinas dentales tienden a llenarse rápidamente. Al reservar con anticipación, puede asegurar una hora y día que sea conveniente para usted.
    • Elija un dentista que sea conveniente. Si su dentista está cerca de su casa u oficina y es fácil de encontrar, es mucho más probable que vaya.
  3. 3 Hacer preguntas. Su dentista y su personal son sus mejores recursos para todas sus preguntas sobre su salud oral. Durante su cita, asegúrese de discutir cualquier problema que tenga. También puede pedir consejos sobre la mejor manera de cepillarse y recomendaciones sobre productos que funcionen mejor para sus dientes particulares.[8]
    • Su dentista también puede ayudarlo a comprender la importancia que tiene su boca para su salud física en general. Pregúntale a tu dentista acerca de los posibles vínculos entre la salud bucal y afecciones como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.[9]
  4. 4 Considera un especialista. Su dentista primario también puede derivarlo a un especialista si tiene algún problema más allá de la atención oral general. Tal vez tengas los dientes torcidos o el espacio entre los dientes delanteros siempre te haya molestado. Su dentista puede recomendarle un ortodoncista para ayudarlo a hacer correcciones.
    • Si tiene enfermedad de las encías o erosión, su dentista puede recomendarle que vea a un periodoncista. Estos médicos se especializan en el cuidado de las encías. Recuerde, sus encías son importantes para mantener sus dientes sanos.[10]
  5. 5 Habla sobre blanquear tus dientes. Una de las mejores maneras de sentirse seguro acerca de sus dientes es hacerlos más blancos. Desafortunadamente, cepillarse solo no puede blanquear tu sonrisa. Pídale a su dentista que le cuente sobre sus opciones. Podría considerar recibir un tratamiento de blanqueamiento en el consultorio o hacerlo usted mismo en casa.[11]
    • Si opta por el blanqueamiento profesional, asegúrese de hablar sobre los costos. El seguro generalmente no cubre el blanqueamiento, ya que se considera cosmético.
    • Si decide intentar blanquear en casa, solicite a su dentista que le recomiende productos que ella considere seguros y efectivos.
    • Si tiene dudas sobre el uso de sustancias químicas, también puede probar el blanqueamiento natural de la casa.

Método tres de tres:
Hacer cambios de estilo de vida

  1. 1 Presta atención a tu dieta. Tiene sentido que lo que ponga en su boca pueda tener un gran impacto en la salud y apariencia de sus dientes. Los dentistas advierten que el azúcar es la sustancia que hace más daño a los dientes. Asegúrese de leer las etiquetas de nutrición y evitar los alimentos que tienen mucha azúcar agregada.[12]
    • Evite refrescos, jugos de frutas y bebidas energéticas. Todos estos contienen cantidades significativas de azúcar que pueden ser perjudiciales para sus dientes.
    • Hay ciertas comidas y bebidas que son buenas para sus dientes. Por ejemplo, beber té (negro o verde) puede disminuir el crecimiento de bacterias en la boca. El queso puede reducir la cantidad de ácido producido en la boca.
    • Come más calcio Este nutriente es compatible con la salud ósea, que incluye la mandíbula. Esto puede ayudar a su salud oral general. Pruebe queso cottage o leche baja en grasa.
  2. 2 No fumes Fumar es dañino para su salud en general y esto incluye sus dientes y boca. Fumar puede causar decoloración de los dientes, enfermedad de las encías, caries y cáncer de boca. Una de las cosas más importantes que puede hacer para ayudar a que sus dientes se vean bien es evitar fumar.[13]
    • Si no fumas, no comiences.
    • Si fumas, intenta dejarlo. Es un proceso muy difícil, pero bien vale la pena el esfuerzo. Pídale a su médico que le recomiende un producto para dejar de fumar, como el parche o una goma de mascar.
  3. 3 Protege tus dientes Para tener unos dientes excelentes, debes conservarlos. Esto significa que debe esforzarse al máximo para mantener sus dientes seguros. Si juegas a algún deporte, considera usar un protector bucal. Esto es especialmente importante si juegas deportes de contacto, como fútbol o roller derby.[14]
    • Los protectores bucales también son muy útiles si rechinas los dientes. Usar un protector puede ayudarlo a evitar el desgaste del esmalte de los dientes mientras duerme. Pídale a su dentista que recomiende un producto; incluso podrían tomar impresiones de tu boca para hacerte un protector bucal personalizado.