Abrir una botella de champaña es un poderoso ritual de celebración. El efecto es grandioso, pero el acto de abrir la botella puede ser complicado si no lo has hecho antes. Tendrás que girar la botella, sostener el corcho y empujar suavemente el corcho fuera de la botella. ¡Asegúrate de agarrar firmemente el corcho a menos que quieras una ducha de champaña! Intente un "suspiro", no un "pop".[1]

Método uno de dos:
Abriendo la botella

  1. 1 Retire la lámina y la jaula de metal. Primero, quite la envoltura de papel de aluminio que cubre el corcho. Luego, desenrosque el lazo de alambre para aflojar la jaula de alambre que protege el corcho. Sé amable y tómate tu tiempo. Mantén el pulgar sobre el corcho para evitar una explosión accidental.[2]
    • ¡No retire la jaula de alambre hasta que esté a punto de abrir la botella! De lo contrario, puede arriesgarse a que la botella se deshaga antes de estar listo. La jaula está ahí para proteger el corcho.
  2. 2 Sostenga la botella apropiadamente. Agarre el cuerpo de la botella en su mano dominante. Acuñe el extremo bulboso del corcho profundamente en la palma de su mano no dominante.[3]
    • Apoye la base de la botella contra su cadera. Si sostienes la botella con la mano derecha, usa la cadera derecha o el lado derecho del torso.[4]
    • Considere sostener el corcho con una toalla de cocina. Esto puede ayudarlo a aplicar la fricción, haciendo que sea más fácil atrapar y contener el corcho a medida que sale de la botella. La toalla también puede proteger contra un derrame.[5]
  3. 3 Gira la botella y sujeta el corcho. Gire lentamente la botella hacia adelante y hacia atrás con su mano dominante. Sigue sujetando el corcho con tu mano no dominante. A medida que el corcho gira, aumente gradualmente la distancia entre sus manos hasta que su mano dominante esté a la mitad de la botella.
  4. 4 Pop la botella. Decide qué efecto estás tratando de lograr. Si está en el interior o cerca de mucha gente, asegúrese de sacar el corcho suavemente para evitar daños. Si desea el efecto dramático de una ducha de champaña, puede abrir la botella con un fuerte pop y enviar el corcho volando alto por el aire. Si está abriendo champaña para una ocasión elegante: procure dar un "suspiro", no un "pop".[6]
    • Apertura suave: reduzca la velocidad de giro hacia el final, una vez que el corcho esté casi fuera. Agarre el corcho con firmeza. Presione su pulgar hacia arriba desde debajo del borde del corcho hasta que se deslice suavemente fuera de la botella. Mantenga su agarre en el corcho, y "atrape" para que no se vaya volando. Intenta hacerlo tan suavemente para que el corcho no haga un sonido de estallido.[7]
    • Apareciendo dramáticamente: usa tu pulgar para sacar el corcho de debajo del labio. Agite la botella para remover la carbonatación, si quiere un poco de desorden y un gran efecto agregado. Apunte la botella lejos de usted, sus amigos y cualquier artículo que se pueda romper en las inmediaciones. ¡Evita probar este método hasta que te sientas cómodo abriendo una botella de champaña con cuidado!

Método dos de dos:
Siguiendo la etiqueta de Champagne

  1. 1 Enfríe la botella antes de abrir. Guárdelo en el refrigerador, en un refrigerador o en un cubo de hielo. Espere al menos unas horas para asegurarse de que el contenido esté completamente frío. Esto no solo mejorará el sabor, sino que hará que la botella sea menos propensa a rociar champán en todas partes.[8]
  2. 2 Ábralo con cuidado en entornos formales. Mantenga firmemente el corcho para que no salga volando de forma inesperada. Lentamente gire la botella, no el corcho, hasta que el corcho esté casi fuera de la botella. Escuche el "suspiro" casi inaudible del corcho que se desata.[9] Luego, sáquelo delicadamente con toda la palma de su mano. Sostenga el corcho sobre la botella abierta durante unos segundos para asegurarse de que la espuma no burbujea.[10]
    • Si está sirviendo champaña como camarero o proveedor de servicios, generalmente se considera una etiqueta adecuada abrir la botella lo más discretamente posible. No rocíe, y no permita que el corcho vuele. Practica hasta que puedas hacerlo sin tanto como un "pop".
  3. 3 Evite sacudir la botella. Champagne es una bebida carbonatada almacenada bajo presión. Cuando agitas la botella, aumentas esa presión a niveles peligrosos. Al abrir una botella de champán altamente presurizado se desatará un poderoso chorro de champaña y se enviará el corcho hacia adelante a gran velocidad.[11]
    • Si agita accidentalmente la botella, déjela reposar durante una o dos horas para que el contenido tenga tiempo de asentarse. El co2 absorberá de nuevo en la bebida más rápidamente si el champán está frío.[12]
  4. 4 Verter lentamente Champagne es carbonatado, y el líquido burbujeante se eleva rápidamente cuando se vierte en un vaso. No derrames ni desperdicies champagne, ¡especialmente si estás sirviendo a alguien más![13]
    • Mantenga el vaso en posición vertical. No inclinarlo para verter.
    • Llene un tercio de cada vaso con champaña. Luego, completa las porciones una vez que hayas derramado un poco por todos.[14]
    • No toque el pico en el borde del vidrio de nadie. El champán a menudo se almacena en bodegas y, en algunos círculos, se considera una mala etiqueta arriesgarse a ensuciar el vaso de alguien.