Triángulo Pose, o Trikonasana, es una pose destinada a movilizar las caderas y estirar el torso. También puede abrir su cofre para permitirle respirar profundamente. Presta mucha atención a tu alineación y ve despacio mientras colocas tu cuerpo en la postura del triángulo. La postura del triángulo puede fortalecer las rodillas, los tobillos, los brazos y el pecho, y también puede reducir el estrés y la ansiedad. Si tiene ciertas condiciones médicas, como presión arterial baja, no intente la postura del triángulo, especialmente sin la supervisión de un instructor de yoga entrenado.

Parte uno de tres:
Cómo entrar en la posición inicial

  1. 1 Párese con los pies separados a la distancia de la cadera en su tapete de inicio. Párate derecho en tu colchoneta. Mantenga los pies separados a la altura de las caderas y los brazos a los lados.[1]
  2. 2 Extiende tus pies. Desde aquí, levante los pies, de modo que haya entre 3,5 y 4 pies (1.1-1.2 m) de distancia entre ellos.[2]
  3. 3 Gira tus pies a diferentes ángulos. En la postura del triángulo, tus pies deben girarse en diferentes ángulos para que puedas maniobrar tu cuerpo correctamente. Su pie derecho y su pie izquierdo deben apuntar en direcciones ligeramente diferentes.[3]
    • Aleja tu pie derecho de tu cuerpo, de modo que tus dedos de los pies estén apuntando hacia afuera. Siga girando su pie derecho hasta que esté en un ángulo de 90 grados.
    • Ahora, gire el pie izquierdo hacia atrás para que los dedos de los pies formen un ángulo aproximado de 45 grados hacia su cuerpo.[4]
  4. 4 Mantenga sus brazos paralelos al piso. Levanta tus brazos hacia afuera en cualquier lado. Forme una línea con sus brazos, yendo desde las puntas de los dedos de un brazo hasta las puntas de los dedos del otro brazo, que se extiende más o menos paralelo al piso.[5]
    • Estire las puntas de los dedos hacia cada lado.
    • Asegúrese de que sus palmas estén hacia el piso y que sus omóplatos estén fijados a su columna vertebral. Para verificar la alineación, voltea las palmas y toma nota de cualquier cambio en la escápula o los hombros, y vuelve las palmas hacia atrás.

Parte dos de tres:
Haciendo el ejercicio

  1. 1 Inhale y llegue a su cuerpo hacia la derecha mientras exhala. Al exhalar, estira el brazo derecho todo lo que pueda hacia la derecha. Deténgase cuando haya llegado lo más lejos que pueda y sostenga su torso en su lugar. Gire sus brazos para que su brazo izquierdo se eleve y su brazo derecho se incline hacia abajo. Idealmente, la línea de tus brazos forma un ángulo de aproximadamente 90 grados con el piso.[6]
    • Al llegar, mantén tu cuerpo hacia adelante. Cuadre sus caderas y hombros hacia la parte delantera de la colchoneta.
    • Mantenga la cintura lo más recta posible mientras se dobla, y mantenga los brazos en línea recta.
  2. 2 Coloque su mano derecha en su espinilla derecha. Llegue tan abajo como pueda cómodamente. Intente tocar su mano derecha con la espinilla derecha, el tobillo o el piso. Siéntase libre de usar un accesorio, como un bloque, aquí. Toque el lugar que le resulte cómodo y le permita mantener el equilibrio.[7]
  3. 3 Estira tanto como puedas. Mientras tocas tu espinilla, tobillo o el piso, estírate tanto como puedas. Alcanza tu brazo izquierdo hacia el techo y tu brazo derecho hacia el piso. Gire lentamente la cabeza hacia la izquierda, mirando a su pulgar derecho, ya que esto puede ayudar a estirar el cuerpo.[8]
    • Si el estiramiento te hace sentir dolor, deja de estirarte y mantén la postura como está. No es necesario que se esfuerce demasiado, y puede tomar un tiempo para que sea lo suficientemente flexible como para estirarse durante esta postura.
  4. 4 Mantenga la posición durante varios segundos mientras inhala y exhala. Ahora, mantenga la posición mientras inhala y exhala. Tome nota de cuánto tiempo puede mantener cómodamente la posición. Comience a salir de la postura cuando esté listo.[9]
  5. 5 Regrese a la posición original en una inhalación. Una vez que haya terminado de sostener la posición, levante con la mano izquierda y levante su cuerpo. Usa tus oblicuos para hacer el trabajo y estabilizar tu cuerpo. Mantenga sus brazos en línea recta, pero desándale los pies. Asegúrate de inhalar en lugar de exhalar.[10]
    • Una vez que haya hecho un lado, repita la misma maniobra en el lado opuesto de su cuerpo.

Parte tres de tres:
Evitando las trampas

  1. 1 Evite la postura triangular si tiene ciertas condiciones médicas. Para la mayoría de las personas, la postura del triángulo es segura. Sin embargo, ciertas condiciones de salud pueden hacer que el triángulo sea arriesgado.[11]
    • No debe intentar la postura triangular si tiene presión arterial baja, diarrea o dolores de cabeza. Debe voltear la cabeza hacia abajo en lugar de hacia arriba si tiene presión arterial alta.
    • Si tienes una lesión en el cuello, debes mantener la postura del triángulo hasta que cicatrice.
  2. 2 Tome una clase de yoga antes de intentar la pose del triángulo por su cuenta. El cuerpo de todos es diferente. Algunas poses pueden ser más o menos seguras para ti, dependiendo de tus habilidades personales. Antes de intentar la pose de triángulo, debes tomar un curso de yoga con la supervisión de un entrenador profesional. Un entrenador puede decirle si la postura del triángulo es segura para usted.[12]
  3. 3 Comience lentamente. Puede llevar un tiempo lograr que los movimientos corporales detrás de la postura del triángulo sean correctos. No se estire ni doble demasiado demasiado pronto. Es posible que no puedas hacer algunos aspectos de la postura del triángulo, como girar la cabeza o estirar el brazo, hasta que hayas practicado por un tiempo. Sé paciente y dale a tu cuerpo el tiempo que necesita para adaptarse.